Un rayo de luz tras el paso de la pandemia

Flowering Jaén alzó la persiana. Después de todas las dificultades que ha creado el coronavirus, en plena crisis, Rubén Pozo, dueño del negocio, decidió cumplir su sueño. Durante el confinamiento, a mediados de abril pensó qué tenía que hacer para poder arrancar su propia empresa, con una pequeña tienda de flores y en el centro de la capital jiennense, en la calle Bernabé Soriano.

“Me quedé en paro y yo tenía la idea de montar mi negocio, que había que invertir en algo porque con el coronavirus era complicado que saliera algo. Fue lo mejor que hice y ha resultado ser muy positivo para mí y para mi hermana Rocío”, destacó Pozo, que se ha sumergido en un sector que no pasa en su mejor momento debido a la suspensión de muchas actividades culturales como son las flores. “Realmente la gente ha seguido regalando flores, esto no ha parado. Además, hemos buscado el paso de gente y qué mejor sitio que la Carrera, no contemplamos otro lugar que no fuera el centro”.

A mediados de abril contactó con la franquicia Flowering, que es famosa por sus bajos precios en las flores. “Cuando nos dejaron
reunirnos, nos vimos en Jaén e hicimos cursos de floristería y en las dos últimas lo preparamos todo”, afirmó el dueño del local, que abrió sus puertas el día de la Virgen de la Capilla y durante toda la mañana no paró la tienda de recibir visitantes, algo que no esperaba Rubén Pozo.