Tres hombres armados con una recortada y una pistola atracan un casino

La Policía Nacional busca a los tres hombres que han perpetrado un atraco a mano armada en un salón de juegos Vali 15 de la capital. Irrumpieron en el local, ubicado en el número 14 de la Avenida de Andalucía, al filo de las doce de la noche del pasado miércoles y, pistola en mano, amenazaron a la camarera para que le diera todo el dinero que hubiera en la caja. Se llevaron un botín que ronda los 4.000 euros, según confirman las fuentes consultadas.

Todo ocurrió en cuestión de minutos. El establecimiento, que también es cafetería, estaba prácticamente vacío a esas horas. Quedaban un par de clientes apostados en la barra, que estaba atendida por una camarera. En la grabación recogida por las cámaras de seguridad del local, se aprecia cómo tres hombres penetran en el casino con rapidez. Van encapuchados con pasamontañas para ocultar sus rostros y también llevan guantes. “Esto es un atraco”, grita uno de ellos, sin perder la calma, mientras amedrenta a los presentes con una escopeta de cañones recortados. Otro de los ladrones lleva una pistola, tal y como consta en la denuncia presentada ayer mismo por los propietarios en la Comisaría.

Los atracadores exigen a la camarera que les entregue todo el dinero que hubiera en la caja registradora. Después, la apuntan con el arma corta y le dicen que abra también la caja fuerte del negocio, que está ubicada en otra dependencia distinta. Atemorizada, la mujer obedece y los ladrones guardan los billetes en una especie de mochila. En total, el botín asciende a unos 4.000 euros, aunque la cantidad exacta todavía está pendiente de un recuento más exhaustivo.

Apenas estuvieron cinco minutos en el salón de juegos. Ya con el dinero en su poder, abandonaron el local y escaparon a pie. La Unidad de Delincuencia Económica y Violenta (UDEV) de la Comisaría, que se ha hecho cargo de las pesquisas, está investigando si, posteriormente, utilizaron algún vehículo en la huida. Tras el robo, los clientes avisaron de lo que había ocurrido a la Policía Local. Una patrulla que estaba por las inmediaciones se personó en el casino en cuestión de minutos. Tras comprobar que el local estaba vacío, hicieron una batida por la zona en busca de los atracadores, tal y como confirman fuentes municipales. Un rastreo que resultó infructuoso.

Los agentes efectuaron la preceptiva comparecencia en la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía que, a partir de ese momento, abrió una investigación para tratar de localizar a los autores. Lo primero que hicieron los agentes de la UDEV fue interrogar a la víctima, que aportó detalles sobre la complexión física de los tres atracadores. Después, solicitaron las grabaciones de seguridad del negocio y han revisado, además, otras cámaras existentes en los alrededores de la Avenida de Andalucía en busca de alguna pista que pueda llevar a la identidad de los autores.

El portavoz oficial de la Comisaría confirma que hay una investigación en marcha, sin querer aportar más detalles al respecto. Las fuentes consultadas explican que los atracadores perpetraron el robo con la tranquilidad propia de los profesionales. Una hipótesis que cobra fuerza, además, por el tipo de armas que utilizaron.

Antecedentes. Se da la circunstancia de que este mismo salón de juegos, que lleva muchos años abierto al público, ya sufrió un intento de atraco hace dos años. En concreto, ocurrió el 15 de junio de 2015, cuando un hombre entró en el local y pidió una cerveza sin alcohol. El ladrón esperó a que el local estuviese vacío para poner en marcha su plan. Se levantó del taburete en el que estaba sentado y dio un paseo para cerciorarse de que no había nadie. Después, pidió a la camarera un plato de aceitunas. La trabajadora entró a la cocina para cogerlas. Cuando regresó a la barra, el hombre ya tenía un cuchillo en la mano, con el que la amenazó. La empleada se resistió y repelió al atracador con un espray de defensa personal. Hubo un forcejeo y ella resultó herida. El delincuente huyó a la carrera sin llevarse ni un euro. Fue detenido días después por la Policía. Se da la circunstancia de que se suicidó en los calabozos.