Trabajan para geolocalizar los refugios del centro de la capital

Encuentro cara a cara con la historia, con el pasado, con esos vestigios que hacen al ser humano conocer más sobre los errores de antes para no pisar en falso en el futuro. Unos bienes soterrados que vienen, además, a ensalzar un tipo de turismo en la ciudad dedicado a los amantes de la historia. Por estos motivos, que no son pocos, el Ayuntamiento se ha planteado colaborar con la Universidad de Jaén (UJA) en una investigación, que fue concedida por el Instituto de Estudios Giennenses (IEG).

En este sentido, el objetivo de los trabajos es bastante claro, se pretende poner en valor y proceder a la catalogación y análisis de la arquitectura militar defensiva de la Guerra Civil española en la provincia pero, en concreto, la colaboración de la Administración local se focaliza, como es lógico, en la propia ciudad de Jaén, donde se comenzaron a dar ya los permisos pertinentes para localizar y delimitar, mediante el uso de un georradar, los refugios antiaéreos que se construyeron en cuatro plazas del centro de la ciudad: San Ildefonso, El Pósito, La Merced y Cruz Rueda, para defender a la población de los ataques durante la contienda del bando sublevado.

Los trabajos no son invasivos. Al menos, así lo puso de manifiesto el concejal de Cultura, José Manuel Higueras, que detalló los pasos que se siguen en el proceso. “El georradar realiza un escáner del subsuelo sin necesidad de levantar el pavimento ni embaldosado, por lo que no se ejecutará obra alguna”, explicó el edil, que se mostró muy convencido de que este proyecto, en cuatro de las plazas del centro de Jaén, “viene muy bien para conocer la historia de la arquitectura civil en la ciudad”. Además, las intervenciones se prevén para la última semana de septiembre, en horario de tarde noche, con el objetivo principal de no interrumpir demasiado el tráfico rodado, puesto que, con más razón, los trabajos previstos se realizarán en pleno centro de Jaén.

El concejal de Cultura, Turismo, Patrimonio y Comunicación también quiso destacar la apuesta municipal por esta iniciativa, que, según valoró, es importante no solo para la capital sino también para la provincia de Jaén, pues, como dijo: “Tiene como pretensión proteger el patrimonio ante futuras acciones urbanísticas, además de servir como trampolín para la elaboración de futuras acciones tendentes a revalorizar el turismo local sostenible, así como la elaboración de posibles actividades educativas”. El equipo del proyecto está formado por cuatro historiadores y didactas de las Ciencias Sociales, como son Santiago Jaén Milla, María del Consuelo Díez, Antonia García y Alba de la Cruz, así como seis arqueólogos, Juan Carlos Castillo, José Luis Serrano, José Luis Castillo, Mercedes Navarro, Eva María Montes y Miguel Ángel Lechuga, y el geofísico José Antonio Peláez.

Sobre cada uno de los vestigios que se localicen se realizará una base de datos con información y se recopilará toda la documentación existente sobre este patrimonio, tanto textual, como fotográfica, cartográfica y bibliográfica. Asimismo, una vez finalizada la investigación, se divulgará este patrimonio entre la sociedad jiennense con la finalidad de crear vínculos emocionales que les permitan la apropiación del mismo y, de esta manera, participar de su conservación, salvaguarda, uso y disfrute como patrimonio jiennense.