Susto tras explotar petardos en una procesión en Pegalajar
El incidente, durante la fiesta de “La Morenita”, se salda con heridos leves
Lo que estaba siendo una noche de sábado inolvidable dedicada a la venerada Virgen de la Cabeza en Pegalajar se convirtió casi en una pesadilla para decenas de vecinos del municipio de Sierra Mágina. El desfile procesional de la imagen de “La Morenita” pegalajeña seguía su curso tal y como se había programado cuando, mediado este, comenzaron a explotar los típicos petardos que no faltan en cualquier celebración local. Hasta ahí, todo normal; sin embargo, el pánico comenzó a cundir entre los devotos marianos segundos después de comenzar las, a priori, inofensivas detonaciones. Dado que no se había seguido ninguna medida de seguridad y que la caja de petardos y fuegos artificiales se encontraba muy cerca de la comitiva de la procesión, tanto los integrantes de esta como los vecinos que contemplaban el desfile, se vieron obligados a huir del lugar para protegerse.
El miedo cundió entre los presentes —entre los que se encontraban varios niños—, una circunstancia que se hizo evidente a través de sus gritos desesperados. Afortunadamente, aunque algunas personas sufrieron quemaduras leves, así como las prendas de varias de ellas, no hubo que lamentar heridos de gravedad y todo quedó, por tanto, en un susto.
La Guardia Civil se encuentra investigando las causas de los hechos, dado que no se descarta que la caja de fuegos artificiales sufriera algún fallo, según explica el alcalde de Pegajalar, Manuel Carrascosa. El regidor explica que fueron los responsables de la cofradía local, fundada hace sólo dos años, los que detonaron los petardos a pesar de que no habían solicitado permiso previo al Ayuntamiento. “No les va a pasar nada porque no ha habido ningún herido grave, según se nos ha dicho desde la Guardia Civil”, revela Carrascosa, que indice en que una ordenanza municipal prohibe el lanzamiento de pirotecnia sin el consentimiento municipal. No obstante, intenta apoyar al colectivo cofrade: “Se trata de una cofradía joven que empezó con mucha ilusión y que ahora lo está pasando mal”.