Sincero recuerdo de aquellos horrores que pararon el reloj
Un minuto de silencio y ofrenda floral en la plaza Jaén por la Paz en memoria de los afectados por los crímenes de los terroristas
FRAN MIRANDA
En Jaén, como en el resto de España, no hay quien sea capaz de olvidar dónde se encontraba y qué hacía exactamente el día en que las cadenas de radio y televisión interrumpieron la programación habitual para dar una noticia, hace justo 16 años, que heló la sangre a todo un país: los atentados en cuatro trenes de la red de cercanías de Madrid perpetrados por una célula terrorista de tipo yihadista. Ocurrió el jueves 11 de marzo de 2004, cuando se celebra también el Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo.
La plaza Jaén por la Paz, donde se ubica el monumento a las víctimas del terrorismo, acogió el acto conmemorativo de la mencionada efeméride. No hubo colores en una jornada con nutrida representación institucional a la que también acudió Manuel González como miembro de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT). Un minuto de silencio sirvió para recordarlas y, tras los sesenta segundos, los presentes rompieron en aplausos para, de esta forma, darle su lugar a las víctimas del terrorismo. Después, Manuel González tomó el atril para dirigirse a los presentes y formular algunas de las peticiones que, todavía hoy, tienen.
Con emoción en sus palabras, se dirigió a las víctimas del terrorismo como personas que enseñaron el mundo “el verdadero significado de las palabras dignidad, valentía, coraje y superación”, a través de la que crearon “un contexto que inspira el trabajo de la Asociación de Víctimas del Terrorismo”. “Para muchos seguimos siendo molestas, incómodas, algo del pasado... A todos ellos nos gustaría recordarles que tenemos muchos motivos para alzar la voz”, dijo González.
No se olvidó de hablar de terroristas confesos y condenados que hoy, como si nada pasase, organizan exposiciones, actos en centros cívicos, dan conferencias y son entrevistados por las televisiones públicas. “Se pagan con el dinero de todos”, recordó, a la vez que afirmó: “Nos encontramos documentales, unidades didácticas y publicaciones que nos venden a los terroristas como luchadores por la libertad”. Con algo de indignación, dijo que lo único que se consigue con este tipo de permisiones es “tergiversar el verdadero relato y blanquear el terrorismo”.
“Somos testigos también de cómo los terroristas son homenajeados en municipios del País Vasco y Navarra”, afirmó el miembro de la AVT, que, en este mismo sentido, indicó que estos actos suponen “escarnio público y humillación” para las víctimas. También criticó duramente sus intervenciones en política. “Los que históricamente actuaron como frente institucional de ETA y que, a día de hoy, siguen sin condenar la violencia, son tratados como agentes políticos y más si sirven de su apoyo, por acción u omisión, para gobernar”, indicó González en un discurso en el que exigió justicia y esclarecer los hechos sobre los que todavía haya algún ápice de desconocimiento.
Tras sus palabras, el alcalde, Julio Millán, lo ayudó a depositar una corona de flores en el monumento a las víctimas del terrorismo para finalizar un acto emotivo y muy reivindicativo.