Protestas por la pérdida de unidades docentes públicas no universitarias
La Junta de Personal Docente de centros públicos no universitarios de la provincia de Jaén, que representa a más de ocho mil docentes, se ha concentrado hoy para reivindicar la defensa de la enseñanza pública y denunciar la progresiva pérdida de unidades. La junta está representada por seis sindicatos de enseñanza ANPE, APIA, CCOO, CGT, CSIF y USTEA, y a estas se ha sumado hoy UGT. Sebastián Vallecillo, presidente de la Junta de Personal, ha leído frente a las puertas de la Delegación Territorial de Educación un manifiesto denunciando que en el proceso de escolarización de los últimos años ha sido una constante la disminución y la supresión de unidades en la red pública, sobre todo en Infantil y en Primaria. Según se ha apuntado desde el colectivo, datos oficiales señalan que desde el curso 2011/2012 son 1117 el total de aulas de Educación Infantil desaparecidas en Andalucía. “Paradójicamente para ese mismo periodo las unidades concertadas en Educación Infantil aumentaron en 181 en el conjunto de Andalucía, principalmente en las ciudades grandes y medias del territorio andaluz, a pesar de un contexto de fuerte descenso de la natalidad. De estos datos se deduce claramente que la crisis económica y demográfica ha sido asumida casi en su totalidad por la Educación Pública. Ante esta situación, nos preocupa que se plantee la concertación de otras enseñanzas, como el Bachillerato”, se indica en un comunicado de prensa.
En la provincia de Jaén se han cerrado 13 unidades de Educación Infantil en localidades como Jaén, Alcalá la Real, Castellar, Fuensanta de Martos, Jamilena, Jódar, Andújar, Los Villares, Martos, Mengíbar, Segura de la Sierra, Solera y Torreperogil. Asimismo, se han suprimido tres Semi-D, esto es, centros de infantil y primaria que tienen el primer ciclo de la ESO: en el colegio Alfonso García (Estación Linares Baeza) se ha eliminado simultáneamente 1º y 2º eso y se ha trasladado al alumnado al instituto Reyes de España, de Linares, y se ha hecho lo propio con 1º de ESO de los Semi-D en los colegios Ruiz Jiménez y Santa Capilla, de San Andrés, cuyos alumnos se han trasladado al instituto San Juan Bosco.
Sebastián Vallecillo ha condenado la política de abandono por parte de la Administración Educativa hacia los centros públicos y la pérdida de unidades, “que se traducirán un año más en pérdida de puestos de trabajo”. Además, ha indicado: "La Junta de Personal Docente rechaza cualquier supresión de unidades en centros públicos docentes porque, por una parte, supone un grave atentado a la oferta educativa pública que la Administración debe garantizar como servicio público esencial de carácter universal, y, por otra parte, se traduce en una agresión directa a la condiciones laborales del profesorado destinado en estos centros."
Así, Vallecillo ha exigido medidas para consolidar las unidades de los centros públicos y la oferta de calidad, así como la estabilidad del profesorado, como la disminución de la ratio en todos los niveles, la reducción del horario lectivo, la atención a la diversidad en condiciones dignas, el aumento de aulas específicas, la ampliación de las horas de apoyo educativo y que se mantengan las plantillas del profesorado, “una medida, por otra parte, necesaria para mejorar la atención del alumnado, los resultados académicos y el logro del tan ansiado objetivo de reducción de los niveles de absentismo”, explica el colectivo. Por último, durante la lectura del manifiesto se ha reivindicado la defensa de la enseñanza pública, “que es la única que garantiza la universalidad, la equidad y la igualdad de oportunidades”, y se ha indicado “que la enseñanza no es un gasto, sino una inversión crucial para formar a los hombres y a las mujeres del mañana”. Asimismo, se ha instado a la Administración Educativa a una mejor planificación educativa que priorice la oferta de enseñanza de los centros públicos, a que evite supresiones y a que recupere las unidades perdidas en los últimos años.