Preocupación por la falta de agua que sufre el olivar
El sector alerta de que los de secano están prácticamente a cero
La situación que presenta el campo jiennense es delicada. No está siendo un año hidrológico bueno, si no todo al contrario, ya que la falta de lluvias es notable y con la llegada del verano y las altas temperaturas el olivar necesita del riego para poder una cosecha abundante el próximo año. Para ello, necesitan que los embalses tengan suficiente agua almacenada para dedicarla al campo, algo que no ocurre tampoco, ya que los pantanos de la provincia están al 31% de capacidad, diez puntos por debajo de los que había la misma semana del año pasado. Esto está ocasionando las limitaciones de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir para destinar agua al campo y al olivar. Por todo ello, el sector agrario se muestra con preocupación con vistas al otoño y al comienzo de la recolección de la aceituna.
El secretario general de UPA Jaén, Cristóbal Cano, señaló: “La situación del campo es preocupante por la falta de precipitaciones. Arrastran un déficit hídrico importante y se ha trasladado a restricciones o una menor dotación de riego en la cuenca del Guadalquivir. En lo que afecta al olivar se ha ampliado a 1.000 metros cúbicos por hectárea, cuando el año pasado estábamos a 1.200. Eso va a tener una indudable repercusión directa sobre el olivar de regadío, no podemos esperar que con menos agua tenga más producción”. Asimismo, Cano alertó que la situación del olivar “es preocupante”. “A pesar de que la floración se pudo catalogar como buena, el cuajado del fruto también, ahora entramos en la parada de verano y es fundamental que tengamos un otoño que permita equilibrar un año hidrológico normal para que la cosecha tenga visos de prosperar”, reseñó.
Por su parte, el secretario general de COAG Jaén, Juan Luis Ávila, resumió la situación que vive el campo jiennense: “Es pronto para hacer una previsión pero estamos viendo que hay menos cosecha de la que cabría esperar. Muchos secanos están prácticamente a cero”. En este sentido, Ávila afirmó: “Es complicado hacer un pronóstico de cosecha pero creo que habrá bastante menos aceituna que el año pasado y si se acerca a algo será a la que tuvimos hace dos campañas. El campo tiene falta de agua, falta de dotación de la Confederación del Guadalquivir que se nota en los regadíos y los secanos han aguantado bien hasta ahora pero empieza a complicarse los días y se arruga la aceituna”.
Por otro lado, el gerente y portavoz de Asaja-Jaén, Luis Carlos Valero, señaló: “Aparentemente puede que por las condiciones climáticas, la cosecha puede ser corta, pero es muy pronto para saberlo”. Asimismo, destacó que hay que esperar “por lo menos a que pase el verano y ver cómo viene el otoño”. Con este panorama, el verano será largo para los agricultores que confían en la llegada de lluvias y agua para poder tener una cosecha buena.