Por la mejora de la sostenibilidad en el olivar

El proyecto aúna a 22 socios de 6 países que además de investigar se centrarán
en divulgar

13 sep 2019 / 11:11 H.

Aunque las prácticas de manejo sostenible en el olivar son conocidas, en ocasiones para el olivarero es complicado ponerlas en marcha, y de ahí surgió la idea de poner en marcha este proyecto”. Esa es la base, explicó Roberto García, catedrático de Ecología de la Universidad de Jaén y responsable de la Unidad de Ecología del Centro de Estudios Avanzados en el Olivar y Aceites de Oliva, del proyecto europeo Sustainolive que coordina, y que persigue la mejora de la sostenibilidad del olivar y la gestión de los subproductos de las almazaras. El proyecto está financiado por el Programa Marco de Investigación e Innovación de la Unión Europea Horizonte 2020, y contará con una financiación de casi 2,1 millones de euros, con un plazo de ejecución de 4 años. En él participan un total de 22 socios de 6 países, que la semana pasada se reunieron para su puesta en marcha.

“Lo que se pretende es dar un impulso al incremento de la sostenibilidad del olivar no solo jiennense, sino también de los principales países productores de aceite de oliva de la cuenca mediterránea. De ahí que Portugal, Grecia, Italia, España, Túnez y Marruecos, que tienen entre un 70% y un 75% de la producción mundial, sean los principales participantes de este proyecto”, manifestó García. Asimismo, explicó que otro de los objetivos es identificar paquetes tecnológicos sostenibles: “Se trata de combinaciones de prácticas de manejo relacionadas con el suelo, la fertilización o la gestión de los residuos de la cosecha, que se puedan implementar a cada una de las tipologías de olivar en cada uno de los países”. En este sentido, añadió que el olivar de cada país “tiene unas debilidades y unas oportunidades concretas” y que pretenden identificar conjuntos, combinaciones de prácticas de manejo, que incidan en un incremento de la sostenibilidad y que ese conjunto de paquetes tecnológicos esté adaptado a la idiosincrasia de cada uno de los olivares de la Cuenca del Mediterráneo. Una de las tareas vitales en este proyecto es que, a través de unas encuestas, se detectarán dónde están las barreras que impiden trasladar el conocimiento que se genera en los centros de investigación al agricultor, y una vez identificadas se propondrán “medidas para romperlas”. También intentarán dar recomendaciones políticas, para que se potencie, se impulse esa ruptura de estas barreras en la transmisión del conocimiento a los que trabajan la tierra.