Patinetes eléctricos: adaptación
y discordia

Un ejercicio de integración para el patinete eléctrico. Este es el trabajo que espera a las concejalías de Movilidad y Tráfico durante los próximos meses —en función de la incidencia del coronavirus a lo largo de las siguientes semanas— para integrar el uso de los patinetes eléctricos al desarrollo urbano de la ciudad.

Este tipo de vehículo es ya una constante en las calles jiennenses y este uso puede ir a más con la llegada del buen tiempo, a expensas de las medidas que se puedan tomar en los próximos días por la expansión del Covid-19.

Desde ambas concejalías ya se traza un borrador para que los usuarios tengan unas normas de uso a corto plazo. Entre estas medidas, se incluyen el uso obligatorio del caso, empleo aconsejable de un chaleco reflectante y de la luz, así como circular a una velocidad máxima de 30 kilómetros por hora. “Esta es la velocidad que tienen las principales avenidas de Jaén, aunque en aquellas cuya velocidad sea menor, deben adaptarse”, señala la edil de Movilidad, Estefanía Plaza. Dicho borrador, una vez redactado, será entregado a la Comisión de Movilidad que determinará su aprobación. “El plazo será largo, pero con esta serie de normas buscamos una perfecta adaptación de estos vehículos cuya presencia será mayor en las próximas semanas”, destaca Plaza.

Mientras tanto, cada día cualquier usuario puede encontrarse estos vehículos circulando por el centro o, en especial, por el Paseo de la Estación. Es el caso de Manolo Bolaños, procedente de Torredelcampo y que utiliza este vehículo para acudir al trabajo. “Suelo aparcar cerca del pabellón de La Salobreja porque en la ciudad apenas hay aparcamiento, me llevo el patinete en el coche y en cuatro minutos estoy en el trabajo”, destaca.

Son muchos los usuarios que se mueven con este transporte respetuoso con el medio ambiente, pero ven convenientes unas medidas para su adaptación en el espacio urbano. “Deberían habilitar, al menos, un carril bici para que los patinetes pudieran pasar por ahí y no por las aceras”. Hay quien apunta más allá, como Sergio Jiménez: “Jaén directamente es la anticiudad para moverte con patinete, hacen falta espacios para los vehículos de dos ruedas y sin motor”. Los peatones también muestran su repulsa, como el caso de Mari Carmen Martínez: “Van muy deprisa y muchas veces no tienen ni cuidado”.