“Nos jugamos la vida, pero era una situación límite”

Daniel Colmenero y José María López son los dos policías locales que llegaron primero al chalé del Puente Tablas, junto a una ambulancia del 061. Nada más aparcar el coche patrulla, una mujer les suplicó ayuda llorando para que sacaran a las personas que estaban atrapadas en el interior de la casa. Los dos se jugaron el tipo para intentar rescatar a las víctimas. “Si no lo haces en una situación límite como esta, ¿cuándo lo haces?”, se preguntan casi al unísono. Daniel entró por la cochera: “La puerta principal estaba muy caliente y no se podía tocar”, explica este agente con nueve años de experiencia a sus espaldas. Su compañero subió a la parte de arriba de la casa por unas escaleras que los vecinos habían colocado y accedió al interior por la terraza tras forzar la puerta con una palanqueta. Ambos tuvieron que hacer varias intentonas para avanzar entre el humo y saber cómo era el interior del edificio.

José María fue el que encontró a la pequeña Carla, de tan solo 4 meses. “Abrí la puerta de la habitación con mucho trabajo. El humo no me dejaba andar. Vi a la niña en la cuna, la cogí y salí tan rápido como pude para dársela a los médicos del 061”, relata. La pequeña Carla llegó con vida a la ambulancia. “Siento una pena inmensa por el fallecimiento de la niña”, aclara este policía local. Mientras tanto, su compañero se afanaba en la planta baja, junto con un miembro del 061. Ambos sacaron, de forma sucesiva, los cuerpos de la bisabuela, del pequeño Antonio y del abuelo paterno. Estaban en el aseo y en la cocina, respectivamente. “Tuvimos muchas dificultades para poder acceder”, añade.

Ambos policías tuvieron que recibir asistencia médica debido a la inhalación de humo. “Eso ya está olvidado”, explica José María. Lo que ninguno de los dos olvidará jamás es el trágico desenlace de este incendio ni las circunstancias en las que tuvieron que trabajar: “Fue horrible, horrible...”, señala Daniel, que no puede contener las lágrimas. Relata que, cuando descubrió el cuerpo del niño, lo cogió por las axilas para levantarlo: “En ese momento, se me vino a la mente la imagen de mi hijo”, concluye.

Los dos policías locales quieren destacar expresamente la “gran labor” desarrollada por todos los profesionales que participaron en el operativo: “Se está personalizando en nosotros, pero los Bomberos, la Guardia Civil y el 061 hicieron un trabajo extraordinario”. Daniel y José María, igualmente, quieren trasladar el pésame a la familia de los fallecidos.