Medidas para vivir en las zonas más desfavorables

La concejala de Políticas Sociales y presidenta de Somuvisa, Ángeles Díaz, presidió la constitución de la mesa por la vivienda, ente de consulta que se habilita en el marco de la Estrategia Andaluza para la Cohesión y la Inclusión Social (Eracis). La mesa tiene como objetivo habitar las zonas más desfavorecidas de la ciudad y las condiciones de sus viviendas. Esta propuesta afecta a la calidad de vida y riesgo de exclusión de los barrios de Antonio Díaz, San Vicente de Paúl, parte de La Magdalena, Polígono del Valle y la concentración de viviendas sociales en la calle Miguel Castillejo.

La mesa por la vivienda está conformada por las administraciones autonómicas y locales competentes en estas materias, así como asociaciones vecinales de los barrios afectados y organizaciones sociales como la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) o Cruz Roja. El grupo se ha formado con el impulso del Patronato Municipal de Asuntos Sociales y la Sociedad Municipal de la Vivienda para propiciar un análisis eficiente de los problemas, ordenando los recursos y acciones integrales a considerar.

Tras constituirse la mesa, Díaz apuntó: “Tenemos claro que la estrategia debe ir encaminada a la rehabilitación y recuperación de espacios perdidos como el casco histórico o viviendas deterioradas que pueda haber en el polígono del Valle, entre otros barrios”. Para ello, la edil desgranó actuaciones como la revisión de los solares y cómo proceder a su limpieza. También se quiere buscar la implicación de entidades privadas para su rehabilitación y darle vida al casco antiguo o rehabilitar viviendas municipales contando con la ayuda de los vecinos. Un proyecto que se ejecutará a través de los fondos DUSI respecto a la rehabilitación de las zonas que establece la estrategia, y por la ITI.

La mesa recoge, entre otras propuestas, incluir —si lo requiere— cláusulas sociales en las licitaciones de los proyectos que ejecuten empresas externas; que el centro de salud de la zona realice el seguimiento de salubridad y mantenimiento de los espacios y viviendas reformadas; las personas beneficiarias de las actuaciones de reforma y rehabilitación lleven un compromiso de las familias de mantener y fomentar hábitos salubres y de cuidado de vivienda y espacios públicos, o desarrollar pedagogía del hábitat en el ámbito educativo en materia transversal al resto de materias.