Los días de agua y nieve se quedarán esta semana

La Aemte mantiene la alerta amarilla hasta las tres de la tarde

08 ene 2018 / 09:17 H.

Que los cielos claros no lleven a engaño. Según la Agencia Estatal de Meteorología, las lluvias regresan a la provincia del Santo Reino a partir de esta semana. Tras redescubrir la alegría de ver nieve en los montes jiennenses y disfrutar de un fin de época navideña con la típica estampa del manto blanquecino, el día despuntó con nubes ocasionales y un intenso frío que, durante la mañana, bajó de los 0 grados y heló varios puntos de la provincia. Las nubes que amenazaban más precipitaciones, finalmente se mantuvieron fuera de la capital, aunque la Aemet mantiene la alerta amarilla por acumulaciones de nieve hasta las 15:00 horas de hoy en localizaciones por encima de los 1.000 metros de altura. De hecho, la cota de nieve vuelve a subir de los 400 a los 800 metros, y a partir de mañana estará en los 1.300 metros.

En la ciudad la lluvia hará acto de presencia a partir de mañana. Las nubes regresan después de dejar unos 15 litros el día de Reyes en la capital. En las zonas próximas a la sierra fue donde se detectó la mayor cantidad de agua acumulada de la provincia. En puntos como Cazorla los pluviómetros rozaron los 20 litros, así como en Aguascebas, en Villacarrillo, que registró 21,4 litros. El Quiebrajano, por su parte, detectó una media de 21 litros. En otras ubicaciones del mar de olivos los datos fueron similares a la capital, con 14,8 en Siles, por ejemplo, o 12,5, en Marmolejo.

El frío fue otro de los detonantes que cambió el paisaje jiennense y que también afectará en los próximos días. Las mínimas bajan y en municipios como Andújar o Alcalá la Real estarán en negativo, mientras que en la capital y en Linares se mantienen en 2 grados. Las máximas en pocos puntos superan los 10 grados, que rondarán entre los 7 y 9 en gran parte de la provincia.

Los bajos registros de los termómetros serán un continuo durante la semana que entra. Las mínimas subirán el miércoles, acompañadas de lluvia, pero volverán a bajar hacia finales de semana. Por ahora no se prevén más alertas en el mar de olivos, aunque desde la Aemet alertan de las intensas bajadas del mercurio a lo largo de la noche, con el consecuente peligro en las calzadas y los riesgos de heladas tempranas en las carreteras.

EMBALSES. La lluvia caída apenas varía la situación de los pantanos jiennenses. Según el último informe de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, en el Quiebrajano, por ejemplo, a pesar del agua del sábado, el embalse se mantiene en 21,68 por ciento de su capacidad, cuando este verano, según los datos de junio, estaba a 29,89. Esta dinámica se repite en el resto de pantanos, como el del Tranco de Beas, ahora a poco más del 31 por ciento, mientras que hace unos meses el dato era de 51,61. Los datos continúan más bajos de los considerados niveles óptimos.

Carreteras sin muchas complicaciones a excepción de alguna placa de hielo

Las carreteras de la provincia apenas tuvieron problemas a causa de la nieve y el temporal de frío. La noche del sábado al domingo fue “tranquila” y el Servicio de Emergencias del 112 no recibieron llamadas de alarma. A pesar de las imágenes en las vías nacionales con atascos y retenciones de horas a merced del invierno más cruento, las carreteras de Jaén están “limpias”. Aun así, según declaran desde el servicio andaluz, los conductores no deben “relajarse”. La mañana de ayer avisaron de una placa de hielo en la A326, a la altura de Peal de Becerro, con los riesgos que acarrea a los conductores. Por fortuna, al final no hubo que lamentar ningún accidente.

Asimismo, en una pequeña carretera de la JH7155 que va del pantano de Aguascebas a la sierra de las Villas, varios particulares llamaron al 112 para advertir de la presencia de nieve en la calzada, que impedía el paso de vehículos. Sin embargo, no se consideró un aviso de gravedad y apenas afectó a los usuarios de la vía. El día transcurrió sin incidentes, pero piden a los conductores estén “ojo avizor” por la posible presencia puntual de heladas, sobre todo a primera hora de la mañana, a causa de la bajada de temperaturas que bajan de los cero grados.