Las orquestas dan la voz de alarma

La Asociación de Orquestas Profesionales, mediante un escrito, buscan hacer pública la situación del sector de las orquestas de verbena.

Este es un sector representado por TOP (Asociación de Orquestas Profesionales de Andalucía), organismo desde el que se emite este escrito. Afirma que, aproximadamente, existen unas 120 formaciones dentro del sector de la verbena y unas doscientas formaciones menores tales como tríos o dúos. Dichas orquestas son empresas gestionadas por una sociedad limitada en su mayoría.

En el comunicado cifran una media de doce trabajadores entre artistas, técnicos y personal de montaje por cada una de ellas que sumadas a las formaciones menores hacen un total de dos mil familias andaluzas que viven de este sector directamente y un número indeterminado que lo hacen indirectamente. Ante la crisis del covid-19 han sido suspendidos todos los eventos y, en consecuencia, su trabajo indefinidamente.

Es debido a esta incertidumbre, sin saber cuándo se reanudaran los eventos masivos, la que les lleva a dar la voz de alarma ante las Administraciones Públicas.

“Pertenecemos a un sector bastante empobrecido y con muy pocos recursos económicos para garantizar la subsistencia a corto plazo y sin recursos algunos a medio y largo plazo. Las ayudas y medidas decretadas por el gobierno no nos llegarán en ningún caso debido al funcionamiento especial de las Orquestas. Pertenecemos a un sector cuyo trabajo es estacional, las fiestas patronales de los pueblos se concentran desde mediados de abril a mediados de octubre en un 95%, el resto del año subsistimos de los pocos ahorros que hemos conseguido en temporada y de la ayuda al desempleo que percibimos. Los trabajadores, artistas y técnicos, no se podrán acoger a ninguna medida adoptada por el gobierno ni se pueden realizar ERTES debido a la situación de baja que tenemos en invierno en nuestro profesión. Los trabajadores no son ni siquiera fijos-discontinuos por diversas causas tales como:

1.- Los músicos cambian continuamente de formaciones, lo cual hace que cambien de empresa.

2.- Las mismas formaciones cambian a su vez de agencia de contratación y muchas son absorbidas por las propias agencias, esto también hacen que cambien de empresa.

3.- Muchos de los trabajadores también hay temporadas que se retiran del sector para volver en temporadas posteriores.

Todas estas causas sumadas provocan la situación en la que nos encontramos, es decir, sin derecho a ningún tipo de ayuda o prestación para paliar esta crisis de consecuencias incalculables”.

En cuanto a las empresas en si, la situación es igual de dramática, con todas las inversiones en infraestructura ya hechas cara a la temporada, pagando alquileres de locales de ensayo, luz, agua, marketing, seguros de RC, gastos publicitarios y un largo etcétera, “con la gravedad de no saber que nos va a quedar de temporada y ni siquiera si habrá temporada”, explican.

En este contexto, la asociación solicita medidas urgentes de apoyo para salvar a los trabajadores a través de dos vías:

- Prorrogar, hasta el fin de la prohibición de celebrar eventos, las ayudas que en la actualidad se están cobrando.

- Permitir que se den de alta los trabajadores del sector a mediados de abril, tal y como se hace habitualmente, y acto seguido aprobar un ERTE hasta el fin de la prohibición de eventos, para que el trabajador perciba un mínimo de ingresos.

Para poder salvar a las empresas, la Asociación Profesional de Orquestas propone:

- Moratoria del pago de todos los créditos o hipotecas que se han destinado a la adquisición de infraestructuras, así como cualquier hipoteca que tenga la empresa o el administrador de la sociedad.

- Moratoria en el pago del recibo de autónomo hasta que se levante la prohibición de eventos.

- Viabilidad para celebrar los contratos contraídos con las orquestas mediante su aplazamiento (y no suspensión) una vez que pase esta crisis.