La provincia aporta el 18,7% del aceite en la cosecha internacional

El olivar se ve como uno de los cultivos más rentables, por lo que el mundo siembra olivos con altas expectativas. El consultor y profesor de la Universidad de Jaén Juan Vilar afirma que ya se produce “oro líquido” en 57 países. De hecho, ahora se recolecta y se moltura zumo de aceituna en el hemisferio sur del Planeta, en un cultivo que antes era exclusivamente mediterráneo, pero que actualmente se cosecha a escala mundial. Miles de productores han sido capaces de salvar escollos importantes, como la meteorología o la ausencia o la abundancia de agua para colocar fincas en sus olivos. “El mundo está preparado para generar 4,5 millones de toneladas. No hay que olvidar que se plantan 152.000 hectáreas al año”, matiza Juan Vilar.

Los olivares que se colocan son mucho más productivos que los que existen en Jaén. Las grandes fincas que se incorporan al producto apuestan por técnicas intensivas o superintensivas para rentabilizar al máximo la cosecha y reducir los costes en favor de la competitividad de la explotación.

Sin embargo, pese a esta evolución de “mapa mundial del olivar”, que siempre apunta a super cosechas, los agricultores jiennenses no pierden el cetro productivo y mantienen su liderazgo. La cosecha de aceite de oliva del mundo durante esta campaña será de 2,676 millones de toneladas, de las que Jaén aporta 502.540, es decir, el 18,7% de la cosecha mundial saldrá de la tierra del “mar de olivos”.

Esto se traduce en que prácticamente uno de cada cinco litros del zumo de la aceituna que se consuma en el mundo habrá salido del olivar jiennense. Pese a que el Planeta está preparado para poner en el mercado 4,5 millones de toneladas de grasa de la aceituna, la realidad es que todavía no se ha llegado a un volumen tan elevado. Los expertos tienen claro que está por venir, pero las cifras indican que aún no ha llegado. La mayor cosecha mundial fue de 3,3 millones. Juan Vilar afirma que muy pronto se lograrán los 3,8 millones de toneladas, por lo que avisa de que habrá que estar preparados porque un volumen tan elevado puede tener una consecuencia grave en los precios o, lo que es lo mismo, que genere una bajada considerable de la cotización por una sobreoferta de aceite de oliva. No obstante, los agricultores de la provincia parece que han dado con la “tecla” para mantener una enorme estabilidad en las cosechas. Mientras que otros competidores se resienten, Jaén aguanta la meteorología y lanza producciones destacadas, como las 502.540 toneladas de este año —es el dato oficial que publica el Ministerio de Agricultura—, incluso cuando las nubes regalan poca lluvia.

productores. La disponibilidad de aceite resulta muy baja. El ritmo de comercialización internacional es alto, lo que ha generado un importante incremento de la cotización. No obstante, detrás de todo esto no hay más que una tremenda escasez productiva. De los diez grandes países productores de aceite de oliva, solo Turquía ha conseguido que su cosecha no bajara más de un 10% —representa el 90% del año anterior—. El resto está por debajo del 30%, es decir, sus aceiteras dispone del 70% del género respecto a la campaña pasada que, precisamente, destacó por un enlace tremendamente bajo. Por eso, se augura una situación de mercado bastante ajustada hasta que los olivares maduren la próxima campaña y comiencen a generar zumo de la aceituna.

Un estudio revela que el consumo mundial apunta a que solo sobrarán 205.000 toneladas de aceite de oliva en el mundo, por lo que hará mucha falta que la recolección de la próxima campaña no se retrase. De ellas, 151.000 estarán en España. No obstante, la producción dependerá mucho de la evolución del cultivo durante estos días. Las precipitaciones ayudarán a incrementar el potencial de la floración, aunque el cultivo arrastra un importante déficit hídrico. Es cierto que el olivar es de secano, pero si se buscan grandes cosechas necesita mucha más agua.