La nueva vida de Nayim

Nayim S. ha pasado dos años y nueve meses en prisión preventiva por un delito que, según la Justicia, no cometió. El pasado miércoles, la Audiencia de Jaén lo absolvió del delito de agresión sexual por el que fue encarcelado y juzgado. Los magistrados estimaron que no había pruebas suficientes como para demostrar que había violado a una amiga que, en el momento de los hechos, tenía tan solo 16 años. Ese mismo día, Nayim S. recobró su libertad. Cruzó el umbral del Centro Penitenciario de Jaén para emprender una nueva vida: “Por el momento, quiere olvidarse de todo lo que le ha ocurrido”, explica el abogado que lo ha representado en este caso, Anselmo Echeverría.

Nayim S., que trabajaba en un cibercafé de Torredonjimeno antes de ingresar en prisión, se ha refugiado con su familia. Uno de sus hermanos reside en un municipio cercano a la capital. “Que yo sepa, es el único familiar que tiene en la provincia y está con él”, explica el letrado, quien sostiene que la sentencia de la Audiencia de Jaén ha hecho “justicia con un inocente”. “Desde el principio, mi cliente reconoció que mantuvo una relación sexual consentida con la denunciante y que no la forzó, ni la amenazó, ni la intimidó. Es, precisamente, lo que dicen los magistrados”, agrega.

La sentencia, que fue notificada el pasado miércoles, todavía no es firme. No obstante, la Fiscalía anuncia que no la va a recurrir. “No hay base para ello”, afirmó el jefe del Ministerio Público en la provincia, Carlos Rueda. “Se puede estar o no de acuerdo con la valoración de la prueba que ha hecho el magistrado en la sentencia, pero no es suficiente para recurrirla, porque no apreciamos error procesal alguno”, añade. Por su parte, la letrada de la menor, Celia Megías, en representación de Amuvi, anuncia que su cliente sí tiene intención de recurrir la decisión ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.

Lo que ocurra afectará directamente a Nayim S. ¿Por qué? En septiembre de 2012, cuando ocurrieron los hechos, estaba en situación irregular en España y, sobre él, pesaba una orden de expulsión del territorio nacional. En el momento en que la resolución alcance firmeza, esa orden, en principio, debe ejecutarse de forma inmediata, por lo que será deportado. “Intentaremos que no sea así”, aclara el abogado. Precisamente, el no tener papeles fue lo que hizo que se marchara cuando la menor presentó la denuncia contra él, en septiembre de 2012. “No se fue del pueblo inmediatamente. Lo localizó la Guardia Civil unos días más tarde. Cuando los vio llegar, salió corriendo, pero no por el asunto de la agresión sexual, sino por su situación irregular”, aclara el letrado. De hecho, Nayim volvió a Jaén seis meses después, tras pasar un tiempo en Marruecos y en Italia: “No tenía conciencia de que lo estaban buscando. Regresó tan tranquilo al pueblo”. Fue en marzo de 2013. Poco días después, la Guardia Civil lo detuvo y el juez instructor lo ingresó en prisión preventiva. Allí ha estado dos años y nueve meses: “Hicimos tres intentos por sacarlo, pero fueron infructuosos. Tanto el Juzgado como la Audiencia le negaron la libertad”, explica Anselmo Echeverría. Por ello, el letrado asegura que está estudiando la posibilidad de presentar una reclamación patrimonial contra el Estado “por el tiempo indebido” que ha estado en prisión.