La “Marea del Cucharón” coge fuerza

Una cortina de humo. Así consideran el plan de mejora de la calidad del Complejo Hospitalario los integrantes del colectivo de trabajadores del sistema sanitario público autodenominado la “Marea del Cucharón”. Según la ley universal de la “acción-reacción”, después de que el gerente del Complejo Hospitalario, José Luis Salcedo, presentara una batería de medidas con el fin de mejorar la atención de los pacientes y la eficiencia, la marea movilizó su oleaje en una comparecencia junto a representantes de todas las fuerzas políticas —excepto el PSOE— y sindicales. “El plan de mejora desoye lo que planteamos en la proposición no de ley en la que el Parlamento dijo al SAS qué tiene que hacer Jaén”, explicó el representante de la “Marea del Cucharón”, Andrés Gómez.

Si bien el traslado del servicio de Neurología a la planta sexta del Neurotraumatológico fue presentado desde la Gerencia como una buena solución que permitirá el aumento de 30 camas en el hospital de la Carretera de Madrid, con la consiguiente descongestión del “Médico-Quirúrgico”, para la “Marea del Cucharón” es todo inconvenientes. Así, Gómez desmantela la iniciativa de Salcedo —después de preguntar a los diferentes especialistas—, al argumentar que la obra en la sexta supondrá sobre un millón y medio de euros. “Y luego no sabemos qué van a hacer con el módulo de detenidos que hay allí”, indica. En cuanto a los profesionales del servicio de Neurología, Gómez aseguró que les explicaron que la especialidad está más entroncada con la Medicina Interna y con Cardiología. “En torno al 80% de las afecciones neurológicas no son susceptibles de intervención quirúrgica. Con el cambio que proponen, habrá un trasiego de pacientes que tendrán que subir al Médico-Quirúrgico para que trabajen los internistas y los cardiólogos”, detalla.

Igualmente, el colectivo apunta que no es posible que puedan abrir 30 nuevas camas en el “Neuro”, debido a la deficiencia de espacio. Ante estos inconvenientes, los trabajadores ponen su esperanza en el Hospital Doctor Sagaz como la principal solución. “Hay plantas cerradas y adaptadas para meter camas y funcionar”, aclara el portavoz.

Otra de las reivindicaciones de la “marea” es la de las habitaciones triples. “Si hablamos de alta tecnología sanitaria y nos olvidamos de lo esencial, del confort y la seguridad de nuestros pacientes, estamos volando sin control”, critica Andrés Gómez, quien recuerda que la Comisión de Infecciones llegó a indicar al anterior gerente, en varias ocasiones, que el hacinamiento de las camas triples es lo que provoca un alto índice de infecciones hospitalarias. “Y eso conlleva el aumento del consumo de antibióticos y de las estancias hospitalarias”, aseveró.