La despedida de Enrique Ponce a la provincia de Jaén
La Sociedad Económica de Amigos del País se abarrotó de aficionados del maestro con motivo del Pregón Taurino
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La primera vez que Enrique Ponce debutó ante el público fue en Castellar y se vistió de luces por primera vez en Baeza. Después, la provincia de Jaén se convirtió en su escuela y su vida. Enrique Ponce ha sido el torero que más veces se ha acuartelado en la Plaza de Toros de Jaén y en el resto de las plazas de la provincia. El viernes, organizado por la Sociedad Propietaria de la Plaza de Toros de Jaén, el salón de actos de la Sociedad Económica de Amigos del País se quedó pequeño para acoger al maestro, que volvía a la ciudad con el propósito de despedirse de su afición. Con motivo del XXII Pregón Taurino de Jaén, y presentado por Ángel del Arco, Enrique Ponce abrió su corazón ante la innumerable afición que se había congregado y que lo esperó pese al retraso del acto.
Enrique Ponce reconoció que “no se podría hablar de mi historia y mi trayectoria sin Jaén”, y, aunque no ha podido despedirse de la Plaza de Toros, Jaén fue el escenario de su primer acto público tras su gran despedida de los ruedos el pasado 9 de octubre en Valencia. Una ciudad con la que admitió haber tenido una vinculación especial y en la no solo cuentan los triunfos profesionales, sino que para él su mayor triunfo ha sido la ayuda proporcionada para construcción de la casa de acogida de la AECC. Ángel del Arco dirigió una entrañable conversación con Enrique Ponce en la que, como dos amigos desde la niñez, analizaron y recorrieron la trayectoria del torero.
Comenzaron por la tarde su despedida, una velada muy emocionante, en la que el cariño de la gente fue su motor y que resume lo que ha sido esta temporada de despedida, todo ello al reconocer que “mi historia estaba escrita, y yo venía a decir adiós”, por ello calificaba esta temporada como una temporada soñada. Después volvieron a los inicios del diestro y comenzaron a analizar el recorrido desde su llegada a Jaén, los momentos claves de su vida, los toros que han marcado su carrera y sin olvidar a personas muy especiales que siempre han estado a su lado como su abuelo o el recordado Ángel del Arco. El acto finalizó con una emotiva despedida por parte de sus grandes amigos. Una ovación cerrada puso el broche de oro.
