La actividad física diaria beneficia el aprendizaje de jóvenes con TDAH

02 oct 2018 / 09:14 H.

Científicos de la Universidad de Jaén (UJA), pertenecientes al Grupo de Investigación Actividad Física Aplicada a la Educación y Salud (AFAES), han revelado en un artículo que la práctica de actividad física diaria beneficia la cognición y comportamiento hacia el aprendizaje de niños y adolescentes, de 6 a 18 años, con Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).

El artículo es fruto de un trabajo en equipo, liderado por Emilio J. Martínez, profesor titular del Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal, y en el que se han analizado las investigaciones internacionales más destacadas durante los últimos 17 años.

El artículo, titulado ‘Acute and chronic effect of physical activity on cognition and behaviour in young people with ADHD: A systematic review of intervention studies’, ha sido publicado en la revista internacional ‘Research in Developmental Disabilities’.

Los hallazgos más destacados son que la actividad física, además de los beneficios ya conocidos en la salud y la condición física, puede mejorar el rendimiento cognitivo y el comportamiento en jóvenes con dificultades de aprendizaje.

“Si realizamos una síntesis de los estudios analizados, el realizar una caminata-carrera o pedaleo durante un intervalo de 20-30 minutos mejora inmediatamente los niveles de atención y concentración”, ha afirmado la investigadora Sara Suárez, primera autora de este estudio.

Los resultados muestran además que un programa de actividad física debidamente planificado con una duración mínima de cinco semanas (3-5 sesiones por semana), a medio-largo plazo, incrementa la actividad cerebral, mejora las funciones ejecutivas, además de favorecer el comportamiento hacia el aprendizaje de los estudiantes diagnosticados TDAH, y consecuentemente mejoran los resultados académicos.

Algunas explicaciones que se exponen a lo largo de este trabajo científico son que la práctica de actividad física a una intensidad moderada o moderada-vigorosa activa el factor neurotrófico derivado del cerebro y la segregación de dopamina, mejorando la función cognitiva.

DESCONOCIMIENTO SOCIAL

Sara Suárez ha manifestado su preocupación ante el desconocimiento social de este trastorno del neurodesarrollo y que en España afecta al 6,8 por ciento de los escolares. “Es evidente que hay que cambiar algo, se debe fomentar la participación en programas adaptados a los recursos reales y a las características del alumno desde el ámbito educativo, familiar e institucional”, ha indicado Suárez.

Ha añadido que “los jóvenes necesitan el apoyo familiar y social para aumentar el nivel de práctica de actividad física” ya que “cualquier joven debería cumplir al menos con el mínimo de actividad física recomendado por la Organización Mundial de la Salud, es decir, 60 minutos diarios durante al menos cinco días por semana”.

Durante el pasado curso académico 2017/18, el grupo de investigación AFAES ha desarrollado en la provincia de Jaén el proyecto ‘Influencia de la Actividad Física en las Actitudes y Cognición de Escolares con Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad’, financiado por Instituto de Estudios Giennenses.

El programa, que ha integrado la actividad física dentro del entorno escolar, ha mostrado importantes datos, aún pendientes de evaluación, pero que una vez más ponen en relieve la importancia de incluir el movimiento dentro de las aulas y muy especialmente en niños y adolescentes que presentan dificultades de atención durante el aprendizaje.

En este estudio también han participado los investigadores Alberto Ruiz-Ariza, perteneciente al Área de Expresión Corporal, y Manuel De La Torre-Cruz, profesor del Departamento de Psicología de la Universidad de Jaén.