Juzgan a un padre acusado de abusar sexualmente de su hija
La Sección Tercera de la Audiencia de Jaén ha juzgado un hombre acusado de abusar sexualmente de su hija de cuatro años aprovechando el régimen de visitas de fines de semana alternos a los que tenía derecho tras su separación para poder seguir viendo a la menor.
R.V.H. ha negado en todo momento haber sometido a su hija a cualquier tipo de tocamiento de índole sexual y ha defendido la buena relación que "siempre" ha mantenido con su hija. "No le he hecho a mi hija absolutamente nada, ni cambiarle un pañal", ha dicho el acusado a preguntas del Ministerio Fiscal.
Ha añadido que es "mentira" que la menor pudiera verle con los pantalones bajados y ha sostenido que tras la separación él vivía con su madre y que era ésta la que atendía a la menor si había que asearla, algo que ocurría en raras ocasiones puesto que él no tenía derecho a que la niña pernoctara con él.
La madre de la niña ha apuntado que todo ocurrió el 19 de julio de 2017 cuando la niña al llegar de estar con su padre le dijo a la hora del baño que le dolían sus partes porque el acusado le había hecho daño.
A partir de aquí saltaron las alarmas y la madre comenzó a preguntar y hacer diferentes gestiones para saber qué se hace en una situación como esa puesto que "yo lo único que quería es que vieran a la niña personas especializadas" hasta que finalmente interpuso la correspondiente denuncia casi un mes después de que se lo dijera la menor.
Por estos hechos, desde Fiscalía se pide que se le imponga al padre una pena de cinco años y medio de prisión como presunto autor de un delito de abusos sexuales, así como una medida de diez años de alejamiento y prohibición de comunicación con la menor tras su salida de la cárcel. También pide el Ministerio Público que se le imponga la privación de la patria potestad durante ocho años.
En concepto de responsabilidad civil, Fiscalía le reclama una indemnización de 6.000 euros. La defensa ha mantenido la inocencia del acusado por entender que la niña ha actuado bajo "la sugestión" o "el adoctrinamiento" de la madre por la relación que ésta mantiene con el acusado, condenado por sentencia por violencia de género.
El abogado defensor ha recordado que en un primer momento la menor rechazó ante el juez que su padre le hubiera hecho cualquier tipo de tocamiento. Sin embargo, el Ministerio Fiscal le ha recordado que la comparecencia de la menor ante el juez de Instrucción no cumplió con los requisitos establecidos para poder tenerla en cuenta.
De hecho, en la realización de la prueba constituida y reproducida en parte durante el juicio, la menor habla en presencia de profesionales y sí apunta con su manera de expresarse a que su padre la tocó en zonas íntimas.