Investigan si un arma hallada en Otíñar mató a Magalhaes

La Policía encuentra una escopeta de cañones recortados

10 jun 2017 / 11:08 H.

A Alberto Magalhaes lo mataron de un tiro en la cabeza cuando se disponía a entrar a su casa en la madrugada del pasado día 25. Cuatro días después, la Policía Nacional detuvo a tres hombres por su supuesta implicación en el crimen. Dos de ellos ingresaron en la cárcel de forma preventiva, acusados de asesinato: Miguel Ángel O. M., alias “Miguelillo”, considerado el presunto autor del disparo mortal, y su cuñado, Rubén M. C., conocido como “El Perenne”, que fue el que, presuntamente, lo llevó hasta el lugar de los hechos en coche y le facilitó la huida. Los investigadores de la UDEV creen que el móvil del crimen fue el despecho. Al parecer, “Miguelillo” descubrió que su esposa y la víctima tenían un romance, “una relación extramatrimonial”, como la define la juez instructora en su auto de prisión.

El rompecabezas estaba prácticamente resuelto en apenas cinco días. Sin embargo, una de las piezas que quedaba por encajar es el arma utilizada en el crimen. Una incógnita que ya puede tener respuesta. Y es que la Policía ha encontrado una escopeta de cañones recortados que estaba oculta en un paraje cercano al Puente de la Sierra, en concreto en las cercanías de la carretera de Otíñar, según confirman las fuentes consultadas. Se encontraba entre unos matorrales, envuelta en una manta. Fue un vecino que paseaba por la zona el que la encontró. Tanto se asustó que salió corriendo del lugar. Días después, se lo contó a un amigo, que fue el que avisó a la Policía Nacional. Los agentes de la UDEV se hicieron cargo de la investigación y, el jueves, acudieron al lugar señalado, donde hallaron el arma. Inmediatamente, fue depositada en las dependencias de la Comisaría, para ser analizada por los especialistas de la Policía Científica. Se trata de determinar si es la escopeta que, presuntamente, utilizó Miguel Ángel O. M. para matar a Alberto Magalhaes. Serán las pruebas de balística las que determinarán si fue el arma utilizada en el crimen. También se buscará la existencia de algún tipo de huella o si hay restos de pólvora que coincidan con los hallados en el cadáver.

Hasta que no lleguen los resultados no se podrá determinar si esa escopeta guarda algún tipo de relación con el crimen de Magalhaes. Un caso que sigue bajo secreto de sumario por orden de la juez instructora, Carmen Ballesteros. Para la semana que viene, la magistrada ha citado a declarar, en calidad de testigos, a las parejas de los dos hombres encarcelados.