Iniciado el expediente para adjudicar los quioscos del Pósito

El Imefe remata unas obras subvencionadas que sufrieron hasta tres parones

26 oct 2016 / 11:52 H.

Acabar las obras que el Ayuntamiento emprendió una plomiza mañana de marzo para remozar los cuatro quioscos de la populosa Plaza del Pósito ha costado “sangre, sudor y lágrimas”. Ha sido una fuente de quebraderos de cabeza confesa para el equipo de Gobierno local, para los hosteleros de la zona y para su clientela y también para los transeúntes que acostumbran a cruzar la plaza. Pero, cuatro meses después de lo inicialmente previsto por la Administración local, ya solo quedan “cuatro remates” para finalizar la adecuación de estos emblemáticos puestos. “Las obras acabaron en septiembre, dentro del plazo establecido, y ya se ha iniciado el expediente para sacar a concesión los quioscos”, aseguró a este periódico la concejal de Servicios Técnicos Municipales e Imefe, Rosa Cárdenas, que subrayó que el objetivo del Ayuntamiento es adjudicarlos “cuanto antes” para generar empleo en una ciudad que, como la provincia, en general, se desangra en paro.

La adecuación de estos quioscos comenzó a principios de marzo en un mano a mano entre el Instituto Municipal de Empleo y Formación Empresarial (Imefe) y la Escuela Taller. Con una inversión de 33.000 euros, financiada con una subvención de 17.000 euros, dentro de los Proyectos Generadores de Trabajo Estable (SEPE), 7.000 euros aportados entre la Junta y la Diputación, y 9.083 euros del Ayuntamiento, los trabajos responden a viejas demandas de los trabajadores que han disfrutado de la concesión administrativa de estos puestos. En concreto, la impermeabilización de las cubiertas y que la entidad local les llevara, de una vez, el agua potable y el saneamiento y que mejorara la red eléctrica. Aunque la subvención no englobaba el quiosco que ocupa la floristería, y cuya concesión administrativa se firmó a veinte años, Cárdenas indicó que se ha intervenido también en él para que los cuatro puestos compartan estética y, además, se le ha instalado también la acometida de luz y agua, de la que carecía hasta ahora, a pesar de que es un bien fundamental en el negocio de las flores.

La ejecución, sin embargo, de las obras ha sido una auténtica odisea y hasta en tres ocasiones los vecinos de la zona han visto cómo se retomaban los trabajos, se hacían zanjas y, a los pocos días, los operarios desaparecían sin saber cuándo volverían a la labor. Esta situación y la necesidad de finalizar las obras en septiembre, porque, de no ser así, el Ayuntamiento se arriesgaba a tener que devolver la subvención recibida, obligó al Imefe a reforzar el personal destinado inicialmente a los trabajos.

Además de empleados del antiguo Plan de Empleo Rural (PER) enviados por la Administración, se ha recurrido a trabajadores de la Concejalía de Mantenimiento Urbano y “a los chicos de otros cursos del Imefe, que, después de su periodo de formación previo, en vez de otro lugar, han realizado sus prácticas” en la adecuación de estos quioscos.

Cárdenas justificó la necesidad de este refuerzo por dos razones. La primera, por el efecto que tendrá la reapertura de estos quioscos en la generación de empleo y en la revitalización de esta céntrica plaza. La segunda, y no menos importante, para evitar la devolución de una ayuda a un Ayuntamiento en quiebra técnica y al que se le acumulan los expedientes de reintegro por subvenciones de la Junta recibidas y no ejecutadas.

Trabajos en las naves del Parque del Bulevar
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A dos meses de que concluya el primero de los talleres formativos que está impartiendo la Escuela Taller sobre carpintería metálica y albañilería, la adecuación de uno de los locales gemelos de la segunda fase del Parque del Bulevar (el que está a la derecha, según se desciende por el Paseo de España) va viento en popa a toda vela. Ya se ha instalado la solería, se han alicatado los baños y se ha empezado a construir un aseo para personas con movilidad reducida y se han realizado los trabajos de fontanería y de electricidad, entre otros. Lo que quedará para otro curso será el cerramiento del local, indicó la concejal de Imefe, Rosa Cárdenas. Durante 6 meses —hasta mediados de diciembre—, en estos cursos están empleadas 17 personas que, antes, se encontraban en paro. Con esta iniciativa, compartida por las concejalías de Servicios Técnicos Municipales y Mantenimiento Urbano, el Ayuntamiento mata dos pájaros de un tiro. Por un lado se adecuan dos naves que están “desaprovechadas” y en “desuso”, utilizadas hasta ahora como almacenes y se genera empleo. El equipo de Gobierno local quiere concesionar este local que se adecua actualmente para su uso como futura cafetería y el otro pretende dedicarlo a ludoteca.