Fusión de dos organizaciones en aras de los trabajadores
La Federación de Empleados de los Servicios Públicos será liderada por José María Puñal tras el congreso

Fusión para ser más eficaces e influyentes. La Federación de Servicios Público (FSP) y la de Trabajadores de la Enseñanza (FETE) son una después de la celebración del congreso de la Federación de Empleados de los Servicios Públicos ( FESP) de UGT Jaén en la Ifeja.
José María Puñal fue elegido secretario general de forma indiscutible, pues el 97, 97 de los apoyos —otorgados por los delegados de la provincia— así lo decidió. El protagonista del congreso, Puñal, agradeció el respaldo recibido y “la confianza depositada” en su equipo humano, cuyo objetivo es muy claro: dirigir la nueva organización los próximos cuatro años. El ya secretario general de la FESP manifestó: “Nuestra ejecutiva trabajará para solucionar los problemas que demanda nuestra afiliación”. Además, instó a los suyos a que “trabajen” y “luchen” por unos servicios públicos universales y de calidad. Cabe destacar que José María Puñal era, antes de la celebración del importante congreso, el líder de la Federación de Servicios Públicos, tal y como señaló Miguel Ángel Cazalilla, secretario de política sindical y salud laboral de la UGT y recién elegido responsable de las labores de comunicación.
Valoración. A juicio de Cazalilla, Puñal ya contaba, antes de la votación, con el respaldo de la mayoría de los afiliados. Destacó que la unificación de las federaciones de la FSP y la FETE que integran la nueva FESP nace con el objetivo de unidad y compromiso con la organización. “Creemos que seremos así mucho más eficaces. Hace dos años tomamos la decisión de integrar las seis organizaciones sindicales que había en tres”, recordó Cazalilla.
También indicó que el colectivo resultante es el más importante en términos de representación, pues tiene, aproximadamente, 7.500 afiliados en la provincia. “Somos la federación más grande, con mucha diferencia”, subrayó.
El acuerdo sindical apunta a un desafío: proteger a los trabajadores, tanto a los de las empresas públicas como a quienes prestan servicios municipales en el ámbito privado. “Cuando nos sentamos a negociar y discutir un convenio lo hacemos para todos los trabajadores, para los que nos apoyan y los que no, y en algún caso concreto hasta para quienes nos critican. Creo que la gente termina por entender que nuestra labor altruista no es solo importante, sino imprescindible”, concluyó.