Fiestas llenas de diversión que sacan lo mejor de los jiennenses

Las asociaciones “Pilar del Arrabalejo” y “Guadalquivir” programan las actividades

10 sep 2018 / 18:08 H.

En Jaén, al mal tiempo no solo se le pone buena cara, se le pone la mejor. Los jiennenses son así. No importa si la lluvia arruinó las fiestas que los barrios de El Pilar del Arrabalejo y Belén el sábado, ya que el domingo se presentó como un día en el que resarcirse, en el que, como terminar el famoso dicho, “hacer limonada”.

Así, la mañana, que se levantó más soleada que la anterior, comenzó en El Pilar del Arrabalejo con una fiesta del agua. Porque si no se puede con el enemigo, siempre es mejor unirse a él. Así, la asociación de vecinos preparó una gran cantidad de hinchables y actividades entre las que hubo una rampa acuática con piscina propia, una jincana acuática, una piscina de bolas para aquellos pequeños que prefiriesen mantenerse un poco más secos. Y, desde las doce de la mañana, no hubo una sola de estas atracciones que estuviese desprovista de las constantes risas de un centenar de niños que acudieron a divertirse. Eso sí, hubo un momento que destacó por encima de todos: la fiesta de la espuma. Un baño que refrescó a pequeños y mayores por igual. Tras esto, el foco de atención se puso en la barra, pues el olor de la paella ya inundaba el barrio y los padres, después de tanto alboroto, ya querían un sitio donde sentarse y disfrutar de un tentempié.

Mientras tanto, en el barrio de Belén se hizo lo propio. En este caso, fue la Asociación de Vecinos Guadalquivir la encargada de organizar los festejos, de los cuales no dejó nada atrás, ya que todo lo que tuvieron que cancelar el sábado por la noche se retomó a la mañana siguiente. Así, Gabriel Esteban Frías, de la orquesta Vendaval, pudo realizar su actuación, finalmente, durante el almuerzo, donde la protagonista también fue una paella. Comida que fue precedida por una jincana infantil para todos los niños del barrio, una misa en honor a San Roque y la esperada entrega de premios a los ganadores de los concursos infantiles. El colofón final a estas fiestas lo puso una fiesta de la espuma a la tarde.