Europa vuelve a cambiar el etiquetado del aceite

La Comisión Europea varía el reglamento para ordenar aspectos novedosos, como la campaña del producto

07 ago 2018 / 08:33 H.

Europa quiere saber la campaña a la que pertenece el aceite de oliva que está dentro de cada campaña. Por eso, acaba de entrar en vigor —lo hizo ayer, 6 de agosto— la nueva norma de etiquetado del zumo de la aceituna, que establece unas condiciones diferentes. En Bruselas se quiere avanzar en materia de calidad y de transparencia, ya que la Comisión tiene claro que solo un caso de fraude enturbia el buen nombre del sector. De ahí que se busca incrementar la información en las etiquetas. El reglamento ya está cambiado, pero ahora se deja a cada país miembro que adopte la decisión final.

En cambio, se trata de una modificación sobre la que tienen que estar pendientes las aceiteras de la provincia, ya que las normas de etiquetado pueden variar en cada país a partir de ahora. Eso sí, Europa permite que cada Estado decida si se adapta o no, aunque si lo hace se tiene que realizar de la forma que dice el reglamento.

La norma entró en vigor ayer, pero los aceites de oliva etiquetados antes se pueden comercializarse hasta que se agoten. Por medio de este reglamento se establece cómo indicar la campaña de cosecha y la indicación de la acidez máxima prevista en la fecha de duración mínima —un término diferente a la tradicional caducidad que existe en otros productos—. La indicación de la acidez máxima que tiene una nueva redacción que no afecta sustancialmente a las normas que ya estaban establecidas. En el caso de que se indique en el etiquetado debe estar con los mismos caracteres, el mismo tamaño y en el mismo campo visual que los peróxidos, ceras y la absorbencia en el ultravioleta.

Además, se establece la forma en la que se debe indicar la cosecha cuando —voluntariamente— el envasador decida indicarla en la etiqueta, ya sea con una indicación de la campaña de producción o reflejando el mes y el año de cosecha. El reglamento sí que deja bien claro que se tiene que establecer el mes corresponderá al de la extracción del aceite de las aceitunas.

Asimismo, se permite que los Estados miembros puedan hacer obligatoria la indicación en el etiquetado de la campaña de cosecha. Sólo podrán hacerlo cuando se trate de aceites obtenidos de aceitunas producidas en el país y cuando el aceite se dedique únicamente a su mercado. De esta manera, se pretende avanzar en cuestiones vinculadas con la transparencia del mercado y ordenar el etiquetado para que los consumidores entiendan la información que se ofrece.

La complejidad que tiene el etiquetado

No es nada sencillo hacer una etiqueta para el aceite de oliva. Además de hacer el producto atractivo para el consumidor, se tiene que ofrecer una información de manera obligatoria y no vale de cualquier manera. Existen parámetros que regulan qué es lo que hay que poner y dónde ha de estar. Precisamente, las sanciones por etiquetas mal hechas se ha convertido en uno de los problemas más importantes para muchas empresas, más aún cuando existen muchos pequeños olivareros que se lanzan a poner en el mercado su propio aceite. Por eso, existen empresas especializadas que se encargan de repasar muchas etiquetas o, incluso, de crear otras para que no exista problema alguno.

De hecho, salvo alguna excepción, la mayoría de las sanciones que se interponen por un etiquetado incorrecto no es porque la empresa quiera esconder algo o no ser transparente. Simplemente, se debe a que desconoce la normativa.