Enrique Ojeda: “Nos sentimos orgullos de la historia compartida con América”
El diplomático es, desde hace unos meses, director de la Casa de América
El director de la Casa de América es un brillante profesional vinculado desde hace años con la provincia de Jaén. Desde su puesto y su potente trayectoria tiene una visión muy lúdica sobre la situación del mundo y sobre la necesidad de potenciar la cooperación y el diálogo entre culturas y civilizaciones.
¿Cuál es su relación con Jaén?
En mis años de escolar, mi era padre notario, viví en Villacarrillo y Úbeda. Fue entre los ocho a trece años. Tengo buenos amigos en la provincia. Cuando dirigí la Fundación Tres Culturas del Mediterráneo hicimos bastante actividades en el conjunto de Andalucía, incluida la provincia de Jaén. La UJA fue una contraparte muy sólida, fructífera y productiva. La idea no era tanto reflexionar sobre la historia, sino usar la parte de convivencia de tres culturas en nuestra tierra para proyectarla sobre los grandes temas del arco mediterráneo. Varias de las actividades se desarrollaron en Jaén.
¿Qué balance ha de sus primeros meses en la Casa de América?
Han sido meses muy intensos. Del conjunto de casas del Ministerio de Exteriores, la de América es la primera que tiene mayor trayectoria y personalidad. Mi llegada coincidió con la retorno a la presencialidad no solo en España, sino en el continente americano. Había muchas visitas no solo de autoridades americanas, pendientes o que se había realizado de forma virtual. Eso nos ha permitido tener una programación muy intensa en todos los ámbitos. Casi toda mi carrera como diplomático lo he hecho en América. En 2022 en la Casa de América cumplimos treinta años. Es sinónimo de veteranía y saber hacer, con vigencia y actualización en todos los campos. Eso nos permite tener una programación muy variada y diversa en todos los ámbitos de relación entre España y América.
¿Cuáles son los objetivos?
Un objetivo, como dicen los estatutos, es reforzar las relaciones entre España y el conjunto de América, en especial los países de Iberoamérica. La sede, el Palacio de Linares, es fantástica, muy funcional, lo que permite realizar varios eventos el mismo día. Esto permite mostrar qué está ocurriendo en América hoy, en el plano político, social, económico, literario... Es un continente rico, variado, diverso, intenso. En segundo lugar el objetivo es reforzar el vínculo iberoamericano, reflexionar y pensar en este sentido.
¿Cómo ve usted la situación actual en Iberoamérica?
Existen elementos generales que confluyen en otras regiones geopolíticas, como la recuperación pospandemia. La pandemia golpeó muy fuerte y ahora se vive una recuperación social, humana y económica. Eso puede decirse de otros continentes, pero hay elementos más específicos, como protestas y movimientos que buscan una nueva relación entre la ciudadanía y el poder y con grandes empresas que prestan servicio. En definitiva, la búsqueda de un nuevo contrato social que acoja al conjunto de la sociedad. Siempre somos optimistas, no falsamente optimistas, y, por tanto, creemos que igual que en otras regiones se busca una recuperación inclusiva e incluyente, en la línea de la economía verde. América Latina es el continente más rico en biodiversidad. Todo esto va a construir estados más inclusivos.
¿Qué panorama se abre en Estados Unidos con Joe Biden?
Es un tema que estamos tratando bastante, a partir de cuestiones como la política fiscal y las grandes reformas. En unas semanas tenemos un evento sobre el papel de la religión en la política de Estados Unidos y nos han visitado el secretario del estado de Texas y el gobernador de Puerto Rico. Es un país con desafío en la política interior y exterior. Tienen una cita importante en noviembre, con las elecciones de mitad del mandato, que suelen ser muy difíciles para el presidente en ejercicio. Tendremos algunos programas sobre esos comicios. Como la Unión Europea tiene que hacer frente a la guerra de Ucrania, que nadie esperaba.
¿Qué importancia tiene la población latina en Norteamérica?
Esto daría para dos o tres mesas redondas. En términos demográficos, los latinos son la unidad de población que más crece en casi todas las regiones de Estados Unidos, incluso en ciudades del norte con Chicago, Nueva York o Boston. Se integran muy bien y buscan aportar a la sociedad que los ha acogido. En conjunto es una historia de éxito, con temas muy interesantes. El uso del español, con presencia en muchos ámbitos, como el universitario y la política, es algo que nos interesa.
Hay una corriente que opina que España debe pedir perdón por la conquista y la colonización de América, ¿cree que debe hacerlo?
Me remito a lo que ha dicho el Gobierno. Siempre nos sentimos orgullos del vínculo y la historia compartida entre España y América.
¿Sigue vigente actualmente la Alianza de Civilizaciones?
Sí, de hecho está dirigido por Miguel Ángel Moratinos. Se busca el diálogo constructivo entre diferentes naciones, culturas y religiones para construir en positivo. Las redes sociales, tan importantes para la juventud, facilita los puntos de encuentro y el diálogo. No siempre se va a estar de acuerdo en todo.
¿Tienen futuro las minorías indígenas de Iberoamérica?
Iberoamérica es muy diversa. De hecho, Bolivia constitucionalmente ya es plurinacional. En Chile se debate el encaje de esos pueblos. Los pueblos indígenas son parte de la riqueza americana, con sus idiomas.
Brasil, dentro de América, es un gigante de habla portuguesa.
Este año es el bicentenario de su independencia. Tendremos un programa de actividades que queremos que sean ambicioso. En la Casa de América debatimos sobre las elecciones, su pujanza económica o el español en Brasil, dialogamos sobre su arte y su literatura, cine en diversos ciclos. Tendremos también exposiciones para dar a conocer su riqueza.
Otro país americano especial es Haití, con su lengua francesa.
Aunque en la Casa de América no somos un actor en lo que es cooperación al desarrollo, con Haití nos pasa un poco como con Brasil, por el idioma. Este año estamos bastante activos con Haití, con actividades sobre su cine, su cultura, su literatura. Vamos a conocer algo más de un país interesantísimo.
¿Se promociona desde la Casa de América la lengua española?
Sin duda. Aunque haya otras instituciones, como el Instituto Cervantes o la Real Academia de la Lengua Española. El propio Ministerio de Asuntos Exteriores ha creado una promoción del español en el mundo y estamos colaborando a otros niveles. Hacemos eventos sobre el español en la ciencia, en la inteligencia artificial... Todos los países del ámbito iberoamericano vamos de la mano para que el español sea lengua de internet y de comunicación en ciencia. La semana próxima hay un gran programa sobre podcasts en español, que en parte lo hacemos aquí.
¿Qué opinión le merece, personalmente, la guerra de Ucrania?
Como ciudadano, me parece una agresión injustificable. Aunque no es tema nuestro, hemos tratado la geopolítica internacional. Se ha hablado de la invasión rusa y la hemos condenado. Muchos miles de inocentes han muerto. Esperemos que la invasión acaba cuanto antes.
¿Qué proyectos tiene la institución que usted dirige?
Tenemos centenares de proyectos, actividades y ciclos. Trabajamos básicamente con ejes transversales. Queremos contar aquí en la Casa de América, lo que ocurre en el conjunto del continente. Ando escuchando a mujeres, jóvenes, pueblos indígenas para que nos digan qué les gustaría. Hay un diálogo dentro de la geopolítica mundial. En el contexto también está la urgencia de la guerra en Ucrania, con sus derivadas energéticas y alimentarias. La región más eurocompatible es América Latina. Continuaremos con el reforzamiento de vínculos, con un programa para dar a conocer la cultura y la historia y para potenciar la relación de América con España.