En Valdeastillas “no pierden bocado”

Ellos se lo guisan y ellos se lo comen. Ni un solo vecino de Valdeastillas se quedó sin probar bocado de la gran paella popular que ocupó el centro de todas las miradas en las fiestas de la barriada. No solo fueron los de Valdeastillas los que disfrutaron de un buen plato de paella, sino que vecinos de otros barrios, e incluso de municipios como La Guardia, no quisieron perderse una celebración sin igual.

La convivencia se respiraba en cada uno de los rincones del patio de la asociación de vecinos. Allí, como hermanos, disfrutaron de la comida todos juntos. Además, se deshicieron en aplausos hacia los cocineros de la paella como seña de agradecimiento. Risas, charlas y mucha diversión. Así pasaron los vecinos de Valdeastillas el último día de un festejo que culmina hoy.

Tras la paella popular, en la que lo más importante era estrechar lazos entre vecinos, familiares y amigos, se dio paso a una gran noche de verbena con orquesta. El patio de la asociación vecinal se convirtió en un hervidero de gente que, con alegría, bailó al son de la música hasta altas horas de la madrugada. En definitiva, un fin de semana cargado de emoción entre unos vecinos que no dudan en mostrar el amor que sienten los unos por los otros cada vez que hay ocasión para ello. No obstante, los de Valdeastillas sí saben cómo hacer una buena celebración, pues llevan de fiesta desde el fin de semana pasado. Unos días que llegan a su fin hoy, con la misa para cerrar las fiestas en honor de la Virgen del Carmen. Además, tanto pequeños como mayores pueden disfrutar de la fiesta del agua. De esta manera, toboganes, piscinas e hinchables ocuparán las zonas aledañas a la asociación vecinal para paliar, por un lado, el efecto de las altas temperaturas y, por otro, disfrutar de una jornada de diversión, alegría y mucha agua. Finalmente, a las 21:00 horas, se entregan los trofeos tanto a los niños como a los mayores que hayan participado en los juegos organizados por la asociación de vecinos. Con esto, Valdeastillas pone punto final a su celebración.

Desde el pasado fin de semana, los vecinos celebran unas fiestas que, según el presidente del barrio, Juan Antonio Domínguez, han transcurrido con “normalidad y sin ningún incidente que lamentar”. “Al contrario, gracias a los vecinos que colaboran siempre con todas las actividades que se proponen. Sin ellos nada saldría adelante”, apunta Domínguez, acerca de un programa de fiestas que persigue contentar tanto al colectivo más joven como a los mayores, algo que, según cree, se ha conseguido.

Unas fiestas muy completas que cuentan con actos que marcan la devoción de los vecinos, como el desfile procesional de la Virgen del Carmen, o la misa, que se celebra hoy; actividades que fomentan la práctica del deporte; otras en las que prevalece la diversión, así como comidas de convivencia donde disfrutan todos los vecinos.