El “youtuber” de las armas, a juicio por un caso de chantaje

Presuntamente, exigió 4.500 euros para no publicar unas falsas fotografías

01 nov 2016 / 11:32 H.

Alejandro C. M., el “youtuber” de Marmolejo, se sentó ayer en el banquillo. No lo hizo por el asunto de los vídeos que publicaba en su canal de internet en los que enseñaba a fabricar todo tipo de armas, sino por una supuesta extorsión a una familia de su pueblo. Presuntamente, les envió dos cartas anónimas en las que les exigía 4.500 euros a cambio de no publicar conversaciones y montajes fotográficos de contenido pornográfico: “Me da mucho asco y mucha impotencia”, repitió el denunciante ante la juez del Penal número 4 de Jaén. Alejandro C. M., por su parte, rechazó ser el autor del chantaje. La Fiscalía pide cuatro años de cárcel por revelación de secreto, mientras que la acusación particular, ejercida por la familia, solicita dos años y medio de prisión por ese mismo delito y por amenazas impropias (chantaje).

Los hechos se remontan al 29 de junio de 2010. Ese día, las víctimas recibieron en el buzón de su casa dos sobres sin remitente. “Para Antonio. Ver en el ordenador”, ponía en el lugar reservado para el destinatario con letra manuscrita. En su interior contenía dos dvd,s y un folio con las “exigencias”. “Ya sabes quién soy. Lleva el dinero al buzón de mi casa”, reclamaba, entre otras cosas. Si no lo hacía, lo amenazaba con hacer públicas en internet unas fotografías pornográficas. Se trataba de un montaje en el que se había colocado un cuerpo desnudo con la cara del denunciante. “Lo que hice fue irme a la Guardia Civil. En principio, no sabíamos quién podía ser. Después, cuando nos tranquilizamos, vimos que el autor era este hombre”, aseguró el denunciante mientras miraba a Alejandro C. M., que estaba sentado en el banquillo.

¿Por qué estaba tan seguro? En la carta se hacía referencia a conversaciones “privadas” que había mantenido la esposa del denunciante con la hermana del “youtuber” en el salón de belleza que ella regentaba. Presuntamente, el procesado las había grabado y las había utilizado para el chantaje. En el juicio, como testigo, también declaró otra mujer, quien explicó que, en esa época, Alejandro C. M. le dejó otro disco con conversaciones grabadas a otra clienta de su hermana.

No obstante, la principal prueba de cargo contra este vecino de Marmolejo es el testimonio de una perito que analizó la caligrafía de los sobres. Dijo estar segura “al cien por cien” de que el autor de la letra manuscrita en los anónimos era Alejandro C. M. El juicio quedó visto para sentencia.

Dos procesos judiciales pendientes

Alejandro C. M. está pendiente de sentarse en el banquillo dos veces más. En 2013, la Guardia Civil arrestó a este vecino de Marmolejo por publicar en su canal de Youtube vídeos en los que enseñaba a fabricar todo tipo de armas. A pesar de la detención, siguió haciendo lo mismo y la Policía volvió a arrestarlo en marzo. Ha estado ocho meses en prisión preventiva por estos hechos.