El Museo de Arte Ibero cumple cuatro años falto de contenido

Hoy hace cuatro años que el Rey de España engrandeció con su presencia la inauguración de un espacio en la ciudad llamado a convertirse en referente internacional. El Museo de Arte Ibero abrió sus puertas al mundo después de veinte años de controversia por culpa del solar en el que se construyó, una manzana que todos recordaban como el lugar de la prisión. El camino estuvo repleto de dificultades y, aunque costó sudor y lágrimas ver convertido en realidad un sueño, los jiennenses pudieron asistir a un hito aquel 11 de diciembre de 2017.

Don Felipe VI habló poco durante su visita, pero no le dolieron prendas en decir, durante el recorrido, que era mucho el continente para tan poco contenido, con el deseo de que pronto sumara piezas de envergadura a las ya existentes. Cuatro años después, todo sigue igual. Las administraciones públicas celebraron por todo lo alto el estreno del Museo Internacional de Arte Ibero, una de las últimas y más prometedoras apuestas de la provincia jiennense para poner en valor su patrimonio arqueológico e histórico, con una exposición temporal que todavía continúa. Han sido varios los intentos para incrementar el patrimonio ibero de un espacio museístico con una infraestructura moderna y extremadamente completa, según los estudiosos, digna de envidiar por cualquier capital. Sin embargo, por el momento no hay una noticia contundente al respecto.

Las fuentes consultadas aseguran que, en los últimos cuatro años, se han trabajado en varias líneas. La primera, incluirlo en la Red Nacional de Museos. El entonces ministro de Cultura y Deporte, José Guirao, cifró en cinco millones de euros la primera aproximación de lo que sería el coste anual del Museo Íbero una vez que entre a formar parte de esa agrupación. El representante gubernamental anunció que esta era la única manera de poder albergar fondos estatales ya que por el momento solo cuenta con piezas de titularidad autonómica. Otra opción que se barajó fue adherir el Museo de Arte Íbero al Círculo de las Bellas Artes de Madrid. Fue otro ministro, José Manuel Rodríguez Uribes, quien planteó la alternativa.

Cuatro años después cobra más fuera una tercera vía. La anunció la consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, Patricia del Pozo, quien dio a entender que hay próximo un acuerdo a dos bandas mediante la fórmula del “depósito renovable”. Subrayó: “Estamos trabajando sin parar con el Ministerio de Cultura para conseguir que las piezas íberas nacionales formen parte de la exposición permanente. No es un tema fácil, el museo es de titularidad autonómica y las piezas son estatales, por lo que tenemos que contar con la colaboración del Gobierno y hemos cambiado en tres años tres veces de ministro”. Corresponderá a Miquel Iceta dotar de contenido a un espacio prácticamente vacío, que deja a los visitantes con ganas de más. Sin embargo, en su gabinete de Comunicación aseguran a este periódico: “No hay nada cerrado”. Primero hay que ver el papel de la rúbrica, después llevarlo a la práctica y, por último, redactar y materializar un Plan Museográfico que la consejera cifró en otros cuatro millones de euros. ¿Cuántos años tendrán que pasar? Nadie responde.