El banquillo espera al acusado de ejercer como médico sin serlo

La Fiscalía reclama más de cuatro años de cárcel para Javier L. V. por delitos de intrusismo y falsedad documental

09 jun 2018 / 10:54 H.

Javier L. V., el hombre detenido en febrero de 2017 por hacerse pasar por médico y trabajar en una UVI móvil, tiene una cita con el banquillo del Penal número 2 la próxima semana. La Fiscalía reclama para él un condena de cuatro años y tres meses de cárcel por delitos de intrusismo profesional y falsedad en documento oficial. Lo más llamativo del caso es que el procesado llegó a trabajar como doctor para la Policía Nacional. Así se explica en el escrito de acusación provisional del Ministerio Público, en el que se relata que Javier L. V. fue contratado durante los días 18 y 19 de enero de 2017 para desempeñar la función y la profesión de médico en las prácticas del Centro de Formación Policial La Enira de Linares. Nadie detectó en ese momento que el acusado ejerciera sin estar en posesión de título alguno.

El fiscal explica que el procesado, que en la actualidad tiene 34 años, falsificó los documentos para simular que había obtenido la licenciatura de Medicina. ¿Cómo lo hizo? Presuntamente, se hizo con el título de otra persona y lo manipuló insertando sus datos personales (nombre, apellido y fecha de nacimiento). Con esos papeles falsos, consiguió “colarse” en el Colegio Oficial de Médicos de Córdoba el 25 de noviembre de 2016. Y, a partir de ahí, Javier L. V. se “fabricó” un currículum profesional con el que, según el fiscal, consiguió engañar a varias empresas para que lo contrataran. Una de ellas fue la que le ofreció trabajar para curar a los policías que hacían sus prácticas en La Enira.

Después de eso, otra empresa le dio un empleo como médico de ambulancias. Fue el 14 de febrero de 2017. El Ministerio Público asegura que Javier L. V. participó en dos traslados de pacientes desde Jaén hasta una clínica de Córdoba y también visitó a otros seis enfermos en sus casas. Trabajos que realizó en apenas una semana. La Policía lo detuvo el día 20 en una clínica privada de la capital jiennense, cuando se disponía a llevar a un paciente en su ambulancia. Cuando fue arrestado, el acusado trató de romper uno de los falsos diplomas que llevaba. En su maletín guardaba, además, un sello médico de caucho con su nombre y varios aparatos para ejercer la medicina. La investigación puso de relieve que Javier L. V. había manipulado diversos documentos siguiendo “un plan preconcebido para simular estar en posesión del título”. Por todo ello, la Fiscalía reclama para él cuatro años y tres meses de cárcel. Hay que recordar que este jiennense ya fue detenido, en enero de este mismo año, por ejercer como falso fisioterapeuta. Fue condenado por ello a 20 meses de prisión, tras llegar a un acuerdo con el Ministerio Público y reconocer los hechos. Esa sentencia está suspendida y, de momento, no ha ingresado en la cárcel. Su defensa está tratando de alcanzar otro acuerdo de conformidad con las acusaciones en el caso del falso médico.