El Ayuntamiento cerrará el año con más de 63 millones de déficit
Propuesta para “cumplir en la medida de lo posible” con la reducción de la deuda
En el pleno de hoy, habrá una nueva demostración de que las cuentas municipales no salen. El concejal de Hacienda, Manuel Bonilla, anuncia que se incluirá en el orden del día una propuesta de urgencia para declarar como no disponibles créditos presupuestarios por valor de 17,6 millones de euros. Con esta medida el Gobierno local trata, en sus palabras, de “cumplir en la medida de lo posible”, una ley que dice que las administraciones locales, al cierre de cada ejercicio, no tienen que tener déficit y, en caso de contar con superávit, lo ahorren. Pero en la capital, cuando se aprobaron las cuentas de 2017, se detectó un desfase entre ingresos y gastos de 81 millones. Para enjuagarlo, el Gobierno local previó ingresos por valor de esa cantidad, por la construcción y cesión de la explotación de aparcamientos subterráneos. El Ministerio de Hacienda dijo que eran entradas económicas de “difícil consecución” y dejó claro que el recorte de los 81 millones era obligado; después de negociar, se planteó que la reducción fuera progresiva. De ahí que se declaran indisponibles 17,6 millones al cierre del ejercicio, cuando el normal funcionamiento del Ayuntamiento no está comprometido, precisa Bonilla. Si se le da la vuelta a la tortilla, como hace la oposición, el resultado es que la deuda, a dos semanas de que acabe el año, es, al menos, de 63 millones de euros.
¿Y de donde salen los 17,6 millones que no se gastarán? Más de la mitad de la suma corresponde al aplazamiento de deuda, aprobada por el Ministerio de Hacienda y que también se abordará hoy en la sesión plenaria, lo que evita tener que pagar en 2017 intereses por valor de 10 millones. A este “respiro”, el concejal Manuel Bonilla aclara que hay que sumar otros conceptos, como dinero presupuestado de más en el capítulo de Personal o en los patronatos municipales que, la semana que viene, tendrán que aprobar acuerdos similares para cuadrar sus números a la baja. También se tiene en cuenta que no hay que acometer inversiones vinculadas a la estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado, al no haber tenido la Administración local todavía acceso a estos fondos europeos, unas ayudas que se traducen en proyectos que precisan aportaciones municipales. En cualquier caso, como asegura, se cumple, de sobra, una de las condiciones impuestas por Hacienda, como es la reducción del 5% de los gastos de funcionamiento de la Administración local. Ante este escenario, la viceportavoz socialista, Mercedes Gámez, muestra su preocupación por los 63,4 millones sobre los que todavía hay que dar explicaciones a Madrid. Y es que, para ella, esta maniobra del Gobierno local, con el visto bueno del Ministerio de Hacienda implica, básicamente, posponer amortizaciones de préstamos. “La estrategia de no recortar gastos y cuadrarlos con ingresos de mentira”, sostiene, la “inventó” el antecesor del alcalde, Javier Márquez, el actual secretario de Estado de Hacienda, José Enrique Fernández de Moya.
“Nos parece absurdo, una trampa”, reflexiona el portavoz de Jaén en Común, Manuel Montejo, que recuerda que, en realidad, si se atiende a que, de los 17,6 millones de los que no se pueden disponer, la mayoría corresponde al aplazamiento en el pago de deuda, la contención real de gasto es de 7 millones. Para colmo, lamenta, para llegar a esta cantidad se detraen gastos destinados al mantenimiento urbano o la limpieza de colegios.