Dos jiennenses dan fe de que no se nace notario
Juan Ignacio Córcoles y Rafael Contreras son los dos únicos comprovincianos entre los 90 que acaban de aprobar en España
Las oposiciones a notario son de las más difíciles en España. Muchas personas sacrifican años de su vida para lograr el objetivo de ejercer su profesión en algún lugar del país. En las últimas oposiciones realizadas, 90 personas aprobaron de las más de 800 que se presentaron para obtener una plaza y entrar en el Consejo General del Notariado. De ellos, sólo hay dos de la provincia jiennense: Juan Ignacio Córcoles, de Andújar, y Rafael Contreras, de la capital, que desempeñarán su tabajo en Olot (Girona) y Villablino (León), respectivamente. Los nuevos notarios proceden de diferentes lugares de España: 22 han nacido en Andalucía; 18 en Madrid; 11 en la Comunidad Valenciana; 7 en Cataluña y en Castilla y León; 4 en Aragón, en Murcia y Galicia; 3 en el País Vasco y en La Rioja; 2 en Castilla-La Mancha y en las Islas Baleares; y 1 en Asturias, en Navarra y en las Islas Canarias. De esta manera, en los próximos meses se repartirán por pueblos y ciudades españolas para ejercer esta función pública.
Los dos notarios jiennenses ponen de manifiesto el duro proceso de la oposición y confiesan su “alegría” al enterarse de que estaban entre los mejores. “Sentí mucha alegría al saber la noticia, no te lo crees, empiezas a revisar la lista de aprobados a ver si no estás. Cosas que pasan cuando mezclas tantos nervios y alegrías”, señala Juan Ignacio Córcoles. Por su parte, Rafael Contreras afirma: “Me sentí muy feliz pero sobre todo agradecido a Dios, a mi familia y a mis preparadores, que son los que me han ayudado y apoyado en este proceso”. Además, dan un consejo a todos que continúan en el proceso intentándolo. “En este caso, el refrán ‘el que la sigue la consigue’ no sirve. Hay que echar muchas horas, es una cuestión de constancia”, reflejó Juan Ignacio Córcoles. En este sentido, Contreras recomendó la oposición: “Se aprenden muchas cosas. Además de una formación jurídica imposible de alcanzar de otro modo, te conoces a ti mismo, adquieres mucha disciplina, fortaleza y a posponer la recompensa inmediata por un enorme premio a largo plazo”.
Con su próxima incorporación a la profesión pasarán a ser 2.786 los notarios que, repartidos por toda la geografía española, vertebran una función con siglos de antigüedad, recogida en la Constitución y nacida de la propia sociedad. Para convertirse en notario hay que ser español u ostentar la nacionalidad de cualquier país miembro de la Unión Europea. Además, hay que ser doctor o graduado en Derecho o título equivalente en esta parcela. Según el Reglamento Notarial vigente los ejercicios de la oposición son cuatro: los dos primeros, orales, y los dos segundos, escritos. Tanto los dos primeros como la lectura del tercero y de la primera parte del cuarto son públicos. El global de todos ellos refleja la puntuación final de la oposición.
Juan Ignacio Córcoles Cuervo: “Estas oposiciones no se aprueban, se ganan”
A sus 37 años, Juan Ignacio Córcoles ha conseguido el objetivo de su vida: sacarse las oposiciones de notario, tras seis intentos. Natural de Andújar, ha estado 14 años preparándose las pruebas, aunque compaginándolo con la Abogacía. “Una vez que te metes, tiene que seguir sí o sí. Nadie te dice cuando lo vas a sacar. Aunque hay gente que lleva casi cincuenta años y no lo consigue”, explicó Córcoles, que añadió: “Sentí mucha alegría al saber la noticia, no te lo crees, empiezas a revisar la lista de aprobados a ver si no estás. Cosas que pasan cuando mezclas tantos nervios y alegrías”. Así, se va a Olot, en Girona, para ser notario. Para los que aún no lo han conseguido, da un consejo: “Es esencial estar preparados y echarle horas porque lo que se busca es la perfección. Estas oposiciones no se aprueban, se ganan, y se hace contra la élite de las facultades de Derecho. Tienes que dar el máximo y ser perfeccionista. Aprueban los 90 mejores y tienes que estar ahí. Hay que echar muchas horas, es una cuestión de constancia”, describió Juan Ignacio Córcoles.
Rafael Contreras Bernier: “Ha sido un proceso largo y difícil pero muy fructífero”
Rafael Contreras Bernier es de Jaén (1993) y tras más de seis años y medio ha conseguido obtener una plaza como notario. “En primer lugar, me sentí muy feliz pero sobre todo agradecido a Dios, a mi familia y a mis preparadores, que son los que me han ayudado y apoyado en este proceso”, confesó este opositor, que realizó sus estudios en Madrid y fue allí donde decidió prepararse las pruebas. “Ha sido un proceso largo y difícil porque transcurre durante los años en los que tus amigos comienzan a ganar dinero, se casan, tienen hijos... pero aún así ha sido fructífero y yo siempre era consciente de que estaba luchando por mi sueño, además de formándome”, destacó Contreras, que irá destinado a Villablino, un pueblo de León. “Quería irme a un sitio en el que fuera el único notario del pueblo”, afirmó. Asimismo, recomienda la oposición: “Se aprenden muchas cosas. Además de una formación jurídica imposible de alcanzar de otro modo, te conoces a ti mismo, adquieres mucha disciplina, fortaleza y a posponer la recompensa inmediata por un enorme premio a largo plazo”.