Detenido un “mulero” que llevaba 1,3 kilos de cocaína

La Policía le dio el alto en un control rutinario de acceso a la ciudad

29 oct 2016 / 11:03 H.

Un control rutinario en el acceso a Jaén desde la carretera de Fuerte del Rey permitió a la Policía decomisar el mayor alijo de cocaína de los últimos dieciocho meses en la provincia: 1,3 kilogramos de “farlopa” de gran calidad. La transportaba Antonio B. L., un ciudadano de Córdoba de 43 años que fue inmediatamente detenido. Los agentes sospechan que se trata de un “mulero”, un mero “correo” encargado de hacer el porte, es decir, de trasladar la mercancía hasta el comprador a cambio de dinero.

La intervención policial se produjo alrededor de las doce y media de la mañana de ayer. Funcionarios pertenecientes al Grupo Operativo de Respuesta (GOR) de la Comisaría de Jaén tenían establecido un control rutinario en el cruce de la carretera de Fuerte del Rey con la Avenida de Barcelona. Es un lugar en el que los “hurones”, como son conocidos estos policías, realizan vigilancias de forma habitual, por tratarse de una de las entradas de la ciudad.

En un momento dado, los agentes dieron el alto al conductor de un Peugeot 207 de color blanco. Lo que, en un principio, parecía una mera identificación protocolaria pronto se convirtió en un asunto de mucha más envergadura. Los agentes vieron que el hombre tenía un palo de grandes dimensiones en el maletero. Cuando lo interrogaron, se puso nervioso. Su actitud levantó las sospechas de los “hurones”, especialistas en este tipo de situaciones. Cuando le pidieron la identificación al conductor, comprobaron que ya le constaban un par de antecedentes por delitos de tráfico de drogas. Así que efectuaron un registro mucho más exhaustivo del coche. En la guantera, Antonio B. L. llevaba un cuchillo de unos 13 centímetros de hoja. Además, el conductor llevaba encima tres teléfonos móviles, algo muy inusual. Sin embargo, el dato que más llamó la atención de los agentes es que las luces del cuadro de mandos no se encendían. Un signo que puede indicar que ha sido manipulado.

El olfato de los policías no les falló. No tuvieron que buscar mucho para dar con la droga. El paquete de cocaína estaba oculto en un doble fondo del salpicadero, justo debajo del volante, en un pequeño habitáculo expresamente construido para eso. En ese momento, los agentes le leyeron los derechos en calidad de arrestado como presunto autor de un delito contra la salud pública. Fue trasladado a la Comisaría, donde permanece en los calabozos a la espera de ser puesto a disposición judicial. Lo más probable es que hoy mismo pase al Juzgado de Instrucción número 2 de Jaén, en funciones de guardia durante esta semana.

Fuentes policiales consultadas por Diario JAÉN aseguran que Antonio B. L. es un “mulero”. Aseguró a los agentes que lo detuvieron que provenía de Córdoba. Eso sí, nada dijo de su destino. En un primer momento, declaró no saber nada de la droga que le fue encontrada en el doble fondo del coche que conducía. Todavía falta realizar las pruebas de pureza a la cocaína intervenida, aunque parece que se trata de mercancía de primera calidad y poco “cortada”, esto es, mezclada.

Lo que sí está claro es que se trata del mayor alijo de farlopa en la provincia en los últimos 18 meses y de la mayor incautación de la capital en años. Fue en junio de 2015 cuando la operación “Triunfal”, desarrollada conjuntamente por la Policía y la Guardia Civil, permitió decomisar en Linares-Baeza y en la capital más de cinco kilos de droga.

La investigación policial continúa abierta para localizar al comprador

¿De dónde venía la droga? ¿A quién iba dirigida? ¿Circulaba delante del detenido algún tipo de vehículo lanzadera? Esas son las preguntas a las que los agentes de la Policía Nacional tratan de dar respuesta tras la intervención de ayer que permitió decomisar 1,3 kilos de cocaína. De hecho, se mantiene abierta una investigación para tratar de identificar al vendedor y al comprador de la mercancía. “Es difícil”, sostienen agentes de la Brigada de Estupefacientes. De momento, se va a analizar todo el entorno de Antonio B. L., el vecino de Córdoba que fue “cazado” cuando transportaba la droga. En un primer momento, el hombre, que ya cuenta con antecedentes policiales por tráfico de drogas, dijo que venía de su ciudad natal. Lógicamente, no dio muchos más detalles. En la Comisaría, guardó silencio. Los investigadores piensan que se trata de un “correo” que traía la droga hasta Jaén, para su entrega a un distribuidor de los considerados “intermedios”. Hay que tener en cuenta que se trata de una cantidad muy importante, valorada en más de 80.000 euros y cuyo valor en el mercado negro se podría haber triplicado vendiéndola “al menudeo”. También se están analizando los tres teléfonos móviles intervenidos al detenido.