Desayuno diferente y saludable

El Jardín de los Sueños celebra un taller de cocina en el que los niños elaboran una sana crema de cacao

08 nov 2019 / 11:01 H.

Comida rica y saludable son sinónimos. Esto es lo que quedó claro en el taller de cocina que el chef del restaurante Juanito, de Baeza, Pedro Salcedo, como maestro de ceremonias, organizó junto con la Asociación para la lucha contra las enfermedades de la sangre (Ales) en el Jardín de los Sueños, en el Complejo Hospitalario de Jaén.

El cocinero se presentó a los niños y rápidamente los invitó a la mesa, donde les explicó que una alimentación saludable no está reñida con que la comida sea sabrosa. “Estamos aquí para preparar una deliciosa crema de cacao con tan solo dos ingredientes”, indicó Salcedo, en referencia a un sobre de chocolate en polvo y aceite de oliva virgen extra. “Este es el motor de nuestra provincia”, les dijo a los niños. Uno de ellos no tardó en alzar el brazo y, cuando obtuvo la atención de todos los demás, dijo: “Yo no puedo comer”. El pequeño estaba en ayunas, pero el chef no tardó en responderle: “No te preocupes, yo te voy a dar luego los ingredientes para que lo prepares cuando puedas comértelo”.

En la mesa acompañaban a Salcedo el presidente de Ales, Juan Galera; la delegada territorial de Salud y Familias, Trinidad Rus, y el director gerente del centro sanitario, Osamah El-Rubaidi. Los cuatro también se colocaron el gorro de chef, se arremangaron y prepararon la deliciosa crema de cacao. “¡Yo no tengo gorro!”, gritó con naturalidad Juan Jesús Padilla, el más joven y enérgico de los pequeños cocineros. Rápidamente, Rus le alcanzó uno de los que habían sobrado, a pesar de que le quedaba holgado y el niño se lo tenía que recolocar a cada minuto. Una dificultad añadida que Padilla superó sin ningún problema.

Los participantes mezclaron el sobre de chocolate en polvo con media botellita de aceite de oliva. Tras remover durante unos segundos, el resultado fue una exquisita crema de cacao. Después, todos probaron el que, según Padilla, era un desayuno “delicioso”, excepto el pequeño que no podía comer, que se levantó y le ofreció el bocadillo a su padre, que acudió como espectador al hospital.

Rus, Galera, Salcedo y El-Rubaidi coincidieron en destacar iniciativas como esta, que ponen en valor un producto de la tierra, como es el aceite de oliva, y que muestra a los niños cómo pueden comer de manera saludable. “Más que a ellos, que también, lo importante es transmitirlo a los padres”, apostilló el chef Salcedo.