Del sueño al olvido: el diseño del tranvía que marcó a una jiennense
Clara Barranco ganó en 2010 el concurso de ideas para el dibujo de los vagones

“Toda la gente a la que le dije que el dibujo del tranvía era mío creerá que es mentira”. Clara Barranco Moreno escribió este mensaje en el grupo de WhatsApp de sus amigos tras enterarse del cambio de diseño del tranvía de Jaén. La joven jiennense fue la ganadora del concurso de ideas, convocado por el Ayuntamiento de la capital, para elegir el diseño exterior de los vagones. La ilusión embargó a una pequeña estudiante cuando supo que su inocente dibujo era el que más gustó al jurado. Sin embargo, a sus doce años, Barranco no imaginaba que el tranvía permanecería cautivo en las cocheras de Vaciacostales durante trece largos años. Tampoco pensaba que ese diseño ya no volvería a ver la luz del día.
“Me siento un poco desilusionada, creé una historia muy vinculada con la ciudad, pero me alegra que salga de nuevo”, comparte Barranco con Diario JAÉN. La joven recuerda bien el diseño que hizo cuando era estudiante de sexto de Educación Primaria: unas ramitas verdes de olivo sobre un fondo blanco, unas aceitunas moradas que salían de esas ramas y un pequeño lagarto en honor a la bestia de la leyenda de la Magdalena. “Lo hice la misma tarde que me dieron los boletines. Quería plasmar el cultivo de la aceituna tan típico de la provincia, el morado de la bandera y el verde del olivar”, asegura. Ahora, ese dibujo ha desaparecido para que tenga la identidad corporativa que comparten otros ferrocarriles metropolitanos gestionados por la Junta de Andalucía.
El arte de dibujar ha sido una constante en la vida de la jiennense. Una hoja en blanco, un lápiz o unas tizas pastel son sus armas para dejar volar la imaginación. “Fue el premio más grande que gané, algo bastante importante y de lo que me siento orgullosa”, sostiene Barranco. Ganar el concurso de ideas fue una motivación para esa pequeña soñadora, una señal de que valía la pena seguir por este camino y no cejar en su empeño. De hecho, cuando tenía 18 años, la joven se marchó a Sevilla a estudiar Ingeniería de Diseño Industrial y Desarrollo del Producto. Actualmente, Barranco es diseñadora técnica en una empresa con sede en Almería, sin dejar de lado el dibujo, que sigue siendo un refugio en sus ratos libres.