Cien voluntarios atienden a los que duermen en la calle

Hasta el lunes no hay albergues y Cáritas ya se pone en marcha

20 nov 2019 / 11:34 H.
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La llegada de personas sin hogar y de inmigrantes en busca de trabajo en la recolección de la aceituna ha activado ya el dispositivo especial de calle de Cáritas con todos sus recursos disponibles y un centenar de voluntarios de nueve colectivos de la capital. Los albergues para temporeros abrirán, con toda probabilidad, el próximo lunes, día 25. No obstante, Cáritas Interparroquial, que coordina el dispositivo, ya ha detectado la presencia de al menos una quincena de personas que duermen al raso, o buscando refugio en cajeros de bancos, solares vacíos, o incluso bajo algunos puentes de los alrededores de a capital.

“La situación no es preocupante, pero hay que actuar para prevenir”, explica a este periódico Javier Porras, coordinador de Cáritas Interparroquial de la capital. Vendrán más personas en busca de un tajo en la aceituna, pese a la información que se traslada por los medios de que esta cosecha va a ser más baja que la del año pasado. La organización de la Iglesia viene observando, por ejemplo, cómo aumenta el número de desayunos o cenas en el Centro de Día Santa Clara. De hecho, el Albergue Municipal, abierto aún como recurso para transeúntes, tiene ocupadas las 60 camas disponibles ahora, hasta que el lunes ponga en servicio las 170 que puede ofrecer en campaña.

El perfil de los que no disponen de techo para dormir estos días, expuestos a la hipotermia, cuando menos, por las bajas temperaturas, es el de un joven, varón, inmigrante, procedente de forma habitual del Magreb o de los países subsaharianos. Muchos vuelven a la provincia a buscar el mismo patrón para trabajar en la campaña. “Jaén es puerto de entrada y salida en este flujo de personas”, dice Javier Porras. Vienen antes de buscar el tajo y regresan cuando termina; eso si es que encuentran trabajo.

Estarán cuatro días en los albergues y, después, si no tiene vivienda, a dormir al raso de nuevo. Al retorno del trabajo, los albergues ofrecen un día más de estancia. Y Cáritas no tiene más recurso que el Centro de Día, donde no pueden dormir; solo desayunar, cenar, ducharse y cambiarse de ropa. ¿Por qué no abren antes los albergues? Es lo que traslada Cáritas a las administraciones, encorsetadas por los trámites burocráticos que los ayuntamientos tiene realizar para abrir los albergues y solicitar las subvenciones. “Habría que empezar, al menos, un mes antes”, puntualiza Porras.

Además, “el presupuesto destinado a sostener los albergues y recurso similares, se ha reducido paulatinamente desde hace unos tres años”. Normalmente la Junta aportaba el 70% y el Ayuntamiento (de la capital) el 30%. Ahora, “la Junta aporta el 30% y el Ayuntamiento tiene que estar buscando de dónde saca el resto”, asegura. Lo cierto es que desde anoche y durante toda la madrugada los voluntarios, de lunes a domingo y rotando en grupos de unas 10 personas, rastrean la ciudad y buscan a los que duermen sin techo. Llevan leche caliente, galletas, mantas y sacos de dormir. Además, folletos informativos sobre los albergues y otros recursos a los que pueden acceder. Documentan todos los datos del dispositivo para analizarlos y fijar conclusiones. Colectivos de la capital se vuelcan en este trabajo social. Aportan voluntarios la Asociación de Vecinos Loma del Royo, un grupo de Maristas, la ONG Poblado Mundo, las cofradías de Semana Santa, el grupo Amigos Solidarios, Los Salesianos y la HOAC, además de Teresianas y la parroquia Santiago Apóstol.

Jaén