Celadores demandan más personal y sistemas de vigilancia

El sindicato de Celadores Conductores de Jaén ha registrado escritos dirigidos a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz; la consejera de Salud, Marina Álvarez, y a la gerente del Servicio Andaluz de Salud, Francisca Antón, con la finalidad de hacerles llegar su malestar por la situación en la que se encuentra la profesión. En primer lugar, por la falta de personal en la provincia. “Todavía existen puntos de urgencias en los que no hay presencia de celadores conductores en la recepción, por lo que esta labor la hacen sanitarios o personal ajeno, con lo que los puntos de urgencias quedan desiertos cuando el equipo de urgencias sale a cualquier aviso domiciliario”, explica el colectivo.

También recriminan la sustitución de ambulancias conducidas por celadores conductores por privadas, con lo que no solo peligran los puestos de trabajo, sino también las competencias de su categoría: “En el distrito sanitario de Jaén los celadores conductores ocupan puestos administrativos, con lo que se incumple su relación laboral y sus competencias laborales. Porque aunque es cierto que el celador conductor debe prestar ayuda en funciones administrativas y las que les encomienden sus superiores, en el caso expuesto se utilizan sus horas de trabajo al completo solo a esas funciones”.

Y en esa misma línea, especifican que en muchos centros de salud el transporte de sangre lo realiza personal externo al SAS (taxistas), así como el transporte de sábanas a la lavandería y el reparto de material a los centros (plataformas de logística). “También hay centros en la provincia donde existe personal en las recepciones que no pertenecen al SAS, sino que son los trabajadores de los distintos Ayuntamientos los que también restan puestos a personal inscrito en bolsa de trabajo. En este sentido debemos considerar que en otras categorías esto no pasa”, explica el sindicato en el escrito.

Otra de sus demandas es el abastecimiento de cámaras de vigilancia o personal en los puntos de urgencias para evitar las cada vez más habituales agresiones en sus puestos de trabajo, puesto que en muchas ocasiones, cuando los sanitarios realizan traslados o avisos domiciliarios, el celador se queda solo en la recepción.

Entre sus principales reivindicaciones está que la categoría de Técnico de Emergencias Sanitarias sea una realidad y se reconozca en el Sistema Andaluz de Salud, puesto que de esta forma entienden que mejorarían los servicios a través de la contratación de personal necesario y especializado. Y, por último, piden que se cumpla con el Plan de Mejora de los Servicios de Urgencias de Atención Primaria, que se renueva en 2018 “pero tan solo en el papel”.