El rostro de las amas de casa
Fue uno de los últimos actos de María Teresa Gómez Zorrilla Sáenz como edil
Una “mujer de su casa” que, sin embargo, se ha pasado la vida fuera de ella batallando por dignificar el trabajo femenino en el hogar, esa labor de Cenicienta que casi nunca obtiene —ni lo persigue— el premio de un zapato de cristal. María Teresa Gómez-Zorrilla es una jiennense comprometida con la igualdad y los derechos de los consumidores, dos banderas a las que ha dedicado —y continúa haciéndolo— su existencia con el convencimiento propio de quien entiende el bien común como el mejor de los ejercicios cotidianos.
Llegó a la política municipal, de la mano de Alianza Popular, en los primeros de la década de los 80 del pasado siglo, movida por su inquebrantable vocación de servicio, y en el Ayuntamiento ocupó un escaño hasta 1987. En la fotografía que preside la página de hoy, precisamente, se la ve a la izquierda del socialista José María de la Torre Colmenero, en el Ayuntamiento jiennense, junto con el resto de la Corporación. Concluida su aventura gubernativa, de la que, pese a una aplastante minoría que imposibilitaba sacar adelante casi cualquier proyecto, guarda un buen sabor de boca, se entregó a la defensa de la mujer —en la Asociación de Amas de Casa Tres Morillas— que, por elección u obligación, trabaja entre las cuatro paredes del hogar.
“Entré en 1975, recién casada y con mis hijos todavía pequeños, en busca de otro ambiente”, asegura. Y lo que empezó como una suerte de distensión terminó convertido en una tarea constante de dignificación que alcanza hasta la actualidad, tras haber ocupado la presidencia de la federación. Un colectivo con quinientas asociadas implicado en la defensa de los consumidores y la promoción y formación femenina, que vuelca sus esfuerzos, entre otras metas, en la reivindicación de una pensión retributiva para las practicantes de esta actividad tan imprescindible como poco reconocida.
Gran aficionada a la lectura y el cine, un mundo en el que hombres y mujeres aprendan, desde la infancia, a compartir las labores domésticas es su ideal de convivencia. Una meta que con personas como María Teresa Gómez-Zorrilla, está cada día más próxima.
Al frente de “Tres Morillas” trece largos años, María Teresa Gómez-Zorrilla es un referente en la lucha por la igualdad. En el año 2008 recogió para su colectivo una de las banderas de Andalucía con la que la Junta la galardonó.
Casada con Jesús Mollinedo—con él posa en la Gala de los Jiennenses del Año de 2010, de la que fue Jurado— y madre de cuatro hijos, es abuela de tres nietos. Su tarea pública no ha sido obstáculo para su otra gran pasión: su familia.
Sobrina bisnieta del padre de los pobres, Bernabé Soriano, nieta del conocido médico José Gómez Soriano e hija del docente e histórico cofrade José Gómez-Zorrilla de Contreras, se confiesa una apasionada de Jaén.