Felipe Castillo, superviviente del Sitio de Baler

En el año 1945 se rodó la película “Los últimos de Filipinas” cuya historia parte de un guion sobre el fuerte del municipio

01 mar 2020 / 18:03 H.

En el año 1945 se rodó y estrenó la película “Los últimos de Filipinas” dirigida por Antonio Román. La historia parte de un guion radiofónico de Enrique Llovet titulado “Los Heroes de Baler” y de otro guión de Enrique Alfonso Barcones y Rafael Sánchez Campoy, titulado “Fuerte de Baler”, que había sido premiado en el Concurso de Guiones del Sindicato Nacional del Espectáculo de 1944. La película fue rodada casi exclusivamente en la provincia de Málaga: en el Jardín Botánico La Concepción y en una cala cercana a Maro, en Nerja. En el filme participan, entre otros, actores tan populares como Fernando Rey, Tony Leblanc y Manolo Moran. La actriz Nani Fernández, en el papel de la tagala Tala, se hizo famosa por cantar la habanera “Yo te diré”. La película narra la resistencia de la guarnición española destacada en la aldea costera de Baler, en la isla de Luzón del archipiélago de las Filipinas, cuando en el verano de 1898, el capitán Enrique de las Morenas y Fossi (1855-1898), los tenientes de infantería Juan Alonso Zayas (1869-1898) y Saturnino Martín Cerezo (1866-1945), asistidos por el oficial medico Rogelio Vigil de Quiñones (1862-1934) y una cincuentena de soldados quedan sitiados por los insurrectos tagalos del katipunan en la iglesia de San Luis de Tolosa de Baler. El sitio de Baler duró 337 días (01-07-1898 al 02-06-1899), y en ese interín, el 10-12-1898, se firmaba el “Tratado de París entre España y EEUU”, que dio por finalizada la guerra hispano-estadounidense y por él, España abandonó sus demandas sobre Cuba, que declaró su independencia. Las islas Filipinas fueron oficialmente vendidas y entregadas a los Estados Unidos por veinte millones de dólares, y la isla de Guam junto con Puerto Rico se convirtieron también en propiedades de los EEUU. Con ello, se puso punto final a cuatrocientos años de historia del imperio colonial español de ultramar.

Pues bien, esta película rescató del olvido la gesta heroica de los defensores del sitio de Baler, por ello, en 1946, la editorial Biblioteca Nueva de Madrid, publicaba la cuarta edición del libro “El sitio de Baler”, de Saturnino Martín Cerezo, y por este motivo Luis González López (1889-1969), cronista oficial de la provincia de Jaén y director de la Revista Paisaje, crónica mensual de la provincia de Jaén, Mayo-1946, pág. 670, publicaba un pequeño artículo, con el título: “Un giennense que estuvo en el Sitio de Baler”, que decía lo siguiente:

Se ha publicado la 4 edición del libro titulado “El sitio de Baler”, escrito por el laureado general Saturnino Martín Cerezo, fallecido ha poco, el cual fue jefe de aquel destacamento como 2 teniente, después de su compañero D. Juan Alonso Zayas y del capitán Las Morenas. (La 1 edición apareció en Guadalajara, en 1904). La reciente lleva un admirable prólogo de Azorín, quien ha tratado de este tema en la Prensa repetidas veces. Los 337 días de resistencia los considera heroísmo que no puede mostrar ninguna nación de Europa. Sí, —escribe renglones más arriba—, desde Numancia no se ha dado caso tan extraordinario en España. Los periódicos dieron la noticia de que había muerto en Barcelona el último superviviente de Baler. Mas se trata de un error: vive en nuestra provincia uno de los héroes, aun en el caso de que no existan otros u otro de los 31 individuos de tropa en otras provincias. En la relación filiada de éstos inserta en anteriores ediciones —tenemos igualmente a la vista la 3, 1934— figura como soldado D. Felipe Castillo Castillo, hijo de Cristóbal y Dolores, de 22 años, del campo, natural de Castillo de Locubín. También se ve su retrato, con el de sus compañeros, a su llegada a Manila el 7 de julio de 1899. Nuestro saludo a este heroico comprovinciano.

Por otro lado, la revista de Historia Militar n. Extra-II, 2019 (La pérdida de las Filipinas y la gesta de Baler), recoge un artículo de Miguel Ángel López de la Asunción y Miguel Leiva Ramírez, titulado “La gesta de la defensa de la posición de Baler, Filipinas (30 junio 1898 – 2 junio 1899)”, que, en la pág. 287, se dice:

Soldado Felipe Castillo Castillo. A su regreso a su pueblo, Castillo de Locubín (Jaén), descubrió que le guardaban luto. Se casó con Patrocinio López y tuvo nueve hijos. No le gustaba hablar de Baler y enterraba toda condecoración o distinción que se le hacía entrega en relación al sitio. Durante la Guerra Civil estuvo encerrado por milicianos en la iglesia de su población local, pero como él recordaba durante su cautiverio «no me mataron en la iglesia de Baler y mucho menos me van a matar en la de mi pueblo». Además, en la revista “Martos. Tu pueblo y tu ciudad”, aparece un artículo titulado “Un paisano entre los últimos de Filipinas” donde, sobre Enrique Castillo Castillo, se dice:

Felipe Castillo Castillo (Castillo de Locubín, 1877- Martos, 1964), castillero, conocido por el apodo de “Seis Reales" en alusión a la pensión vitalicia que recibió por haber sido uno de los treinta y tres “Últimos de Filipinas", sobrenombre con el que se conoció a los soldados de la guarnición de Baler, en un remoto lugar de la isla de Luzón, que estuvieron manteniendo la posición durante cerca de un año después de la capitulación española en Filipinas.

Nacido en un cortijo castillero, se dedicó durante la mayor parte de su vida a las labores del campo, antes de ser llamado a filas para ir a combatir a Filipinas. Allí sirvió durante cerca de tres años, hasta 1899, cuando él y sus compañeros de armas, tras mil y una penalidades, fueron repatriados.

De vuelta a los campos entre Castillo y Martos, se dedicó a las labores agrícolas. En 1936, durante la Guerra Civil, fue detenido por un piquete de milicianos y apresado en la ermita de Martos durante más de dos años. Estuvo a punto de ser fusilado en varias ocasiones, pero sobrevivió a su cautiverio y volvió a sus labores en el campo.

En 1946 acudió al estreno de la película "Los últimos de Filipinas", alusiva al hecho en que intervino. Su nieto, profesor de Secundaria, ha escrito y publicado recientemente el libro "Regreso a Luzón", en el que, de un modo bastante particular, recrea el recorrido de su abuelo hasta Luzón, que él realizó hace algunos años.

Además, hay que resaltar que un biznieto del soldado Felipe Castillo Castillo (1877-1964), llamado Enrique Castillo Alba, nacido en Martos, Profesor e Ingeniero Técnico Industrial en Mecánica, que llevado por su interés por conocer la guerra de la pérdida de las Filipinas en la que intervinieron su bisabuelo y un hermano, le ha llevado a escribir dos novelas tituladas:

1. Regreso a Luzón // Enrique Castillo Alba // De Librum Tremens, 2012, 180 págs.

2. Regreso de las colonias // Enrique Castillo Alba // Cultura Libros, 2015, 186 págs.

Asimismo, decir que Enrique Castillo Alba ha participado junto a Jesús Valvuena García, biznieto del cabo de la gesta de Baler, Jesús García Quijano (1875-1947), en el coloquio de la proyección del documental “Los últimos de Filipinas. El regreso a Baler”, rodado por Musa Producciones en 1993, en varios lugares de España y Filipinas, cuyo guionista y director es Jesús Valvuena García, y como narrador el cantante Luis Eduardo Aute, que se ha celebrado en la Casa de la Cultura de Jaén (Biblioteca Pública Provincial), el martes 18-02-2020, a las 19,00 horas, dentro de la XIX Muestra de Cine Español Inédito en Jaén. Resultó ser un magnífico y agradable documental.

Y, por último, manifestar que Enrique Castillo Alba y Jesús Valvuena García son amigos y miembros de la Asociación Nacional “Últimos de Filipinas-héroes de Baler”, cuya misión es ayudar a difundir la historia de España, nuestra cultura e idioma, propiciar el hermanamiento entre los pueblos hispanos y, en particular, la difusión de la gesta histórica de los Héroes de Baler.