Asimilando todo lo ocurrido

Ya pasamos del mes de confinamiento en nuestros domicilios y nos va dando tiempo a asimilar lo que está pasando. El miedo y las desastrosas macrocifras van dejando paso a un hueco para poder reflexionar qué está pasando en el mundo, qué estamos haciendo cada uno para poder volver a la normalidad anterior, qué tenemos que cambiar para poder salir de esto siendo mejores y cómo podemos ayudar a los que peor lo pasen. Una reflexión más serena, con la lógica incertidumbre del futuro y con la empatía suficiente para pensar que absolutamente todo el mundo quiere sacar lo mejor de sí para solucionar esta situación.

Me gustaría hablar como alcalde de Chilluévar, pero también como ciudadano con familia, pues vivo por un lado con la responsabilidad de ser el representante municipal de todos los ciudadan@s del municipio y también soy un vecino más que llego a mi casa y me preocupa la salud de los míos.

En el ámbito municipal todo ha ido muy rápido, la cantidad de información que nos ha llegado ha hecho que tengamos que hacer un esfuerzo en tiempo para poder ir sabiendo cómo teníamos que actuar ante esta pandemia; en el ámbito municipal, aunque somos el primer eslabón de cercanía, en estos casos somos el último de cumplimiento obediente de las normas que nos dictan. Aunque hemos tenido que mezclar ese cumplimiento con improvisaciones, creo que los alcaldes y alcaldesas hemos dado, una vez más, una respuesta con una absoluta dedicación, esfuerzo, cercanía y preocupación por cada uno de nuestros vecinos y vecinas, haciendo labores de desinfección del municipio, buscando material y equipos para protección de nuestros vecinos, trabajando codo a codo con servicios sociales para que no se nos escape ningún caso de emergencia social que pudiese haber en el pueblo, planificando y organizando todos los servicios, atendiendo a cada vecino y vecina en toda la casuística que se les va presentando día a día, intentando estar en contacto con los comercios y negocios de la localidad para ayudarles a disminuir el riesgo, con el consultorio médico, con los de ayuda a domicilio, con los trabajadores del Ayuntamiento, con los servicios de mantenimiento, etcétera. No tengo más que agradecimientos a todos y admiración por hacer las cosas muy fáciles en tiempos tan difíciles. Estamos ante una crisis sanitaria y económica, y desde las administraciones tenemos que estar muy unidos para salir de las dos sin dejarnos a nadie en el camino ni en una ni en otra, y en esa tarea estamos día a día, hora a hora, minuto a minuto. Haremos todo lo que esté en nuestras manos para ayudar en la primera y en la segunda, con responsabilidad y trabajo.

Y también me gustaría dar mi opinión como un ciudadano más, con los mismos miedos e incertidumbres que cualquier amigo, familiar o vecino de mi pueblo. Que no hay más bien preciado en la vida que la propia vida y la salud, que es importante que salgamos reforzados como sociedad de esta pandemia y que todos queremos lo mejor para nuestras familias, pero para que a nuestras familias les vaya bien, tenemos siempre que querer también lo mejor para los demás. Aprovechemos estos momentos para disfrutar de nuestros hijos, para disfrutar de la familia, para fortalecernos como personas y para ayudar a todo aquel que esté peor que nosotros.

Un mensaje de esperanza, porque vamos a vencer esta situación, porque la unión de todos nos hará invencibles y que aprendamos a luchar siempre en comunidad, para que todos tengan la oportunidad de no quedarse en el camino.