Benjamín Prado

01 dic 2019 / 12:03 H.

Benjamín Prado (Madrid, 1961) es un novelista, ensayista y poeta español. Ha recibido diversos premios, entre los que se encuentran el Hiperión, el Premio Internacional de Poesía Ciudad de Melilla, el Premio Andalucía de Novela y el Generación del 27. Sus primeros cinco libros de poesía, Un caso sencillo (1986); El corazón azul del alumbrado (1990); Asuntos personales (1991); Cobijo contra la tormenta (1995) y Todos nosotros (1998), están reunidos, junto con numerosos inéditos que van incrementándose en cada una de sus ediciones, en el volumen Ecuador (2002). Después ha publicado Iceberg (2002) y Marea humana (2007). Destacamos su obra Acuerdo verbal: poesía completa (1986-2014), (2018).

En el ámbito de la poesía, el estilo de Prado ha sido considerado cercano al culturalismo, y ha sido incluido en la denominada Generación del 99 junto a otros autores como Aurora Luque, Amalia Bautista o Vicente Gallego. Su culturalismo procede del mundo de la cultura en un sentido amplio que incluye no sólo la “alta cultura” sino también el cine o la música rock. En Cobijo contra la tormenta, por su parte, encontramos poemas culturalistas que se revelan desde el título: Las flores de Isla Negra, Siete preguntas para Kurt Cobain, La lámpara de Alberti, Luis Cernuda en Hyde Park Gate, Bukowski en Nueva York, Jack Kerouac en la casa encendida.

Es en Todos nosotros donde este culturalismo que se revela a través de los títulos se muestra más homogéneo. Casi todos los poemas que tienen un título culturalista – Sylvia Plath en Madrid, Yo y Anna Ajmátova, Tú qué sabrás de Marina Tsvietáieva, Marga Gil en la isla, Mirando fotos de Anne Sexton – evocan la figura de escritoras suicidas, que han pasado a la historia literaria tanto por su obra como por las condiciones adversas de su vida. Por si el lector no conociera nada de estas mujeres, el autor incluye cinco notas al final del libro con el mismo título que los poemas. Libro con contenido de escritoras del que espero pronunciar un conferencia en un próximo Festival Grito de Mujer en Jaén, y publicarlo con Calameo y Xabier Susperregi. Juan Senís Fernández ha podido ver cómo el culturalismo de la poesía Benjamín Prado aparece en dos niveles diferentes. De un lado, en lo que hemos llamado nivel de la elocutio o superficie textual del texto. Es ahí donde conviene ubicar las citas, citas no literales, referencias, menciones y alusiones, recursos a través de las cuales se hace presente el culturalismo en el texto; y también el análisis de las funciones estilísticas que dicho recursos poseen dentro del poema.

De otro lado, el culturalismo aparece en los niveles de la inventio y la dispositio, o, dicho de otra forma, en la estructura profunda del texto. En este caso se puede hablar propiamente de poemas culturalistas, ya que la presencia del culturalismo en ellos no se reduce a elementos puntuales, sino que condiciona toda la estructura del poema y se convierte en su fuerza motriz y su motivo principal.