Yelena Isinbayeva, elegida Premio Príncipe de Asturias de los Deportes 2009

La atleta rusa Yelena Isinbayeva ha sido galardonada con el Premio  Príncipe de Asturias de los Deportes 2009, según hizo público hoy en  el Hotel Reconquista de Oviedo el Jurado encargado de su concesión.  Considerada la mejor deportista de todos los tiempos en su  disciplina, Yelena Isinbayeva ha logrado alcanzar marcas históricas,  al convertirse en la única mujer que ha superado los cinco metros de  altura en salto con pértiga, estableciendo un total de 27 récords  mundiales.

    02 sep 2009 / 14:31 H.

    El Jurado de este Premio -convocado por la Fundación Príncipe de  Asturias- estuvo presidido por Juan Antonio Samaranch, marqués de  Samaranch, e integrado también por José María Abad, Alejandro Blanco,  Agustín Castellote, Enrique Castro, María Escario, Misael Fernández  Porrón, Julián García Candau, Ignacio Gómez-Acebo, Eduardo Inda,  María del Carmen Izquierdo, Javier Jiménez Vaquerizo, Jaime  Lissavetzky, José Antonio Luque, Javier Muñoz Gallego, Santiago Nolla  Zayas, Josep Pedrerol, José Ramón Pindado, Matías Prats, Julián  Redondo, Angel Rodríguez, Nemesio Rodríguez, José Sámano, José Luis  Sánchez-Izquierdo, Arantxa Sánchez Vicario, Orfeo Suárez, José Luis  Vilaseca i Guasch, Emma Villacieros e Ignacio Martínez (secretario).
    Según consta en el acta aprobada por el jurado, en Isinbayeva  recaen las condiciones fundamentales por las que se concede el premio  y que se refieren "además de la ejemplaridad de su vida y obra, a que  haya conseguido nuevas metas en la lucha por superarse y contribuir  con su esfuerzo al perfeccionamiento, cultivo o promoción de los  deportes". 
    Así, el jurado recordó que Yelena Isinbayeva ha mejorado en  veintisiete ocasiones el récord del mundo en salto con pértiga, la  última de ellas en la reciente competición en Zurich, en donde mostró  "espíritu de superación encomiable, puesto que logró su nueva marca  después de haber sufrido la decepción de no ganar el campeonato del  mundo disputado en Berlín". Para el jurado, los logros de la rusa la  han convertido en "la mejor deportista de todos los tiempos en su  disciplina".
    Yelena Isinbayeva nació en Volgogrado (Rusia) en 1982. Inició su  carrera deportiva como gimnasta y a los 15 años comenzó a entrenarse  en la especialidad atlética de salto con pértiga, en la que ya ha  logrado marcas históricas, con un total de 27 récords mundiales, 15  al aire libre y 12 en pista cubierta. 
    Al inicio de su carrera ya destacó en su primera competición, al  alcanzar los 3,50 metros. En 1998 acudió al Campeonato del Mundo  júnior, en Annecy (Francia) donde saltó 4 metros. Su primera medalla  de oro llegó en los Juegos Mundiales de la Juventud de 1999 en  Bydgoszcz (Polonia), donde alcanzó los 4,10 metros. En el año 2000,  en los Mundiales júnior en Chile, logró un salto de 4,20 metros y el  oro de estos campeonatos. Ese mismo año debutó en sus primeros Juegos  Olímpicos en Sídney y en 2001 consiguió de nuevo el oro, con un salto  de 4,40 metros, en los Campeonatos de Europa júnior, celebrados en  Italia. 
    Sus primeros grandes éxitos deportivos llegaron en 2002. A la  medalla de plata conseguida en los Campeonatos de Europa de Munich,  se unió la de oro del Campeonato Nacional de su país en pista  cubierta y aire libre. En los Campeonatos de Europa sub 23 celebrados  en 2003 en Polonia consiguió la medalla de oro.
    Batió por primera vez el récord del mundo en un encuentro  deportivo en Gateshead (Reino Unido) con un salto de 4,82 metros, que  la convirtió en favorita para los Campeonatos del Mundo de atletismo  de ese año en París, aunque quedó en tercera posición. En marzo de  2004 se proclamó campeona del Mundo en pista cubierta en Budapest,  estableciendo un nuevo récord con un salto de 4,86 metros. En los  meses siguientes, superó su propia marca en sucesivos encuentros  deportivos hasta saltar los 4,90 metros en julio. 
    En los Juegos Olímpicos de Atenas estableció un nuevo récord  mundial y olímpico con un salto de 4,91 que le valió el oro. En  septiembre de ese año, en Bruselas, subió un centímetro su propio  récord. En julio de 2005 superó de nuevo su marca mundial en cuatro  ocasiones en tres competiciones internacionales distintas. Primero en  Lausana (Suiza), con un salto de 4,93 metros, luego en los  Campeonatos de Europa en pista cubierta de Madrid, donde consiguió el  oro con un salto de 4,95 metros y, finalmente, en Londres, donde  alcanzó los 4,96 metros. En un salto posterior rompió la barrera de  los cinco metros, todo un hito en la historia del deporte, que  revalidó en Helsinki al solicitar el listón en 5,01 cuando ya tenía  asegurado el título. 
    En 2006 consiguió su decimonovena plusmarca, al batir su propio  récord en pista cubierta en un encuentro en Ucrania, donde saltó 4,91  metros, y el título europeo al aire libre en Gotemburgo (Suecia). Ese  mismo año, en la Copa del Mundo de Atenas, obtuvo un nuevo oro y en  el último Campeonato del Mundo, celebrado en Japón en 2007, revalidó  su título. Durante la temporada indoor de 2008, sumó su vigésimo  primer récord mundial al saltar 4,95 en Ucrania y se proclamó  campeona del Mundo en Valencia.
    En su primera competición al aire libre de la temporada, en Roma,  superó su mejor marca, fijando el nuevo registro en 5,03 metros, que  superó poco después en Mónaco, con un salto de 5,04. En los Juegos  Olímpicos de Pekín revalidó su título de campeona olímpica y batió de  nuevo su marca, con 5,05 metros, su vigésimo cuarto récord mundial.  En 2009, batió en Donetsk (Ucrania) dos veces su plusmarca en pista  cubierta, que colocó en 5,00 metros, y en Zúrich la de aire libre,  que situó en 5,06. En 2004, 2005 y 2008 la Fundación Internacional de  Atletismo (IAAF) le eligió atleta mundial del año y en 2007 y 2009  fue distinguida con el Premio Laureus a la mejor deportista de la  temporada anterior.
    Los Premios Príncipe de Asturias están destinados, según los  Estatutos de la Fundación, a galardonar "la labor científica,  técnica, cultural, social y humana realizada por personas, equipos de  trabajo o instituciones en el ámbito internacional". Dentro de este  espíritu, el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes "será  concedido a la persona, institución, grupo de personas o de  instituciones que, además de la ejemplaridad de su vida y obra, hayan  conseguido nuevas metas en la lucha del hombre por superarse a sí  mismo y contribuido con su esfuerzo, de manera extraordinaria, al  perfeccionamiento, cultivo, promoción o difusión de los deportes". 

    SÉPTIMO PREMIO
    En esta edición concurrían un total de 25 candidaturas  procedentes de Austria, Estados Unidos, Etiopía, Francia, Italia,  Jamaica, México, Noruega, Rusia, Suecia, Suiza y España.
    Este ha sido el séptimo de los ocho Premios Príncipe de Asturias  que se conceden este año, en que cumplen su vigésimo novena edición.  Anteriormente fueron otorgados el Premio Príncipe de Asturias de las  Artes al arquitecto británico Norman Foster, el de Cooperación  Internacional a la Organización Mundial de la Salud, el Premio  Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales al naturalista británico  David Attenborough, el de Comunicación y Humanidades a la Universidad  Nacional Autónoma de México (UNAM), el Premio Príncipe de Asturias de  Investigación Científica y Técnica a los ingenieros estadounidenses  Martin Cooper y Raymond S. Tomlinson, y el Premio Príncipe de  Asturias de las Letras al escritor albanés Ismail Kadaré. El Premio  Príncipe de Asturias de la Concordia se fallará el 10 de septiembre.
    Cada uno de los Premios Príncipe de Asturias, concedidos por  primera vez en 1981, está dotado con cincuenta mil euros, la  escultura creada y donada expresamente por Joan Miró para estos  galardones, un diploma y una insignia acreditativos. Los galardones  serán entregados en otoño en Oviedo, en un solemne acto presidido por  el Príncipe de Asturias.