Y Santa Isabel se hizo del ‘far west’
No se vive con tranquilidad en Santa Isabel, es más, aquello parece una ciudad sin ley, como en las películas. Lo de menos es que te escupan en el pelo a poco que te descuides o que fomenten la música con coches-altavoces, que tiene su aquel, pero bueno, Lo que no se puede consentir, bajo ningún concepto, en un Estado de Derecho es que una pandilla de chicos y chicas (energúmenos cuando poco) hagan del barrio su propiedad y destrocen todo lo que quieran.
Impunemente, repetidamente. Rajan ruedas, roban móviles, dinero, relojes y joyas, amedrentan a los niños y a las niñas, incluso a las madres que les salen al paso y reprochan su actitud (incívica es poco calificativo), hacen botellón donde quieren y hasta la hora que quieren y el no va más, bailan flamenco encima de los coches. Han leído bien: ¡Bailan flamenquito con la chapa del techo de los coches del barrio como tablao! Ea, con un par. Se mean, se cagan donde quieren y hasta follan en plena calle, para dar muestras incontestables de la educación que tienen y del indudable temor que a la ley le profesan. Los vecinos, como no podía ser de otra forma, han dicho basta y exigen a las fuerzas de orden público que hagan su trabajo. Anuncian además que los ánimos están muy caldeados y que a alguien de la gente honrada y trabajadora, sufridora y paciente, abnegada y solo entregada al bien de común de la familia y el barrio, o sea todos menos los desalmados pandilleros, se le pueden cruzar los cables. Votemos porque así no sea y mientras tanto, acción eficaz de control y provención tanto de la Policía Local como de la Nacional y a los jueces un poquito de por favor para que no entren por una puerta y salgan por la otra, que se ríen del mundo (y de sus señorías también, aunque no se lo crean) cada vez que por una noche de vandalismo salvaje reciban una reprimenda en forma de multa que nunca pagarán y preparados para otra noche de desenfreno a base de alcohol, drogas y sexo... Nunca imaginé escribir una crónica de este tipo, en una ciudad tan apacible y monótona como Jaén, pero la realidad, ya se sabe, supera siempre a la ficción. ¡Y esta es de película!
Adivina... adivinanza
“Se ha tenido que ir lejos de su Corporación porque sus antiguos compañeros de partido y cañas le hacían la vida imposible”
(9-11-2014)
LA CLAVE
En una vida completamente nueva, acaba de regresar a Jaén, no tan lejos del pueblo que sufrió todo tipo de vejaciones políticas
“¿Qué alcalde de Sevilla echa pestes por la boca de otro alcalde de Jaén por una jugada que le hizo hace meses?”
(21-12-2014)
LA CLAVE
Ya no es alcalde, ganó las elecciones, pero se juntaron para echarlo, eso sí, sigue hablando mal, muy mal, fatal, cuando se lo nombran
La perla de la semana
“La Junta Local de Seguridad Ciudadana tuvo que suspenderse porque las dos autoridades que la presidían se enzarzaron en una pelea que ruborizó a los asistentes
A media voz
Y si con Felipe López echara a andar...
No tiene mala pinta, es más, podría decirse que las cosas han cambiado de forma radical, aunque aparente que todo es igual que siempre. Pero sí, que el tranvía eche a andar no es algo que corresponda a marcianos de Marte, como parecía hasta ahora. ¿Qué ha cambiado? Un consejero de Fomento de Jaén (quien lo construyó también lo era) que asume como una indecencia que esté en cocheras y propone novedades para sentarse a negociar. El alcalde ya ha respondido que valora la nueva realidad. ¿A que es otra música? ¡Lo que ganaría Jaén con él tranvía!
Y... al fresco
”La Feria de San Lucas tiembla por las casetas” (Portada 11 de septiembre) uSi no hay dinero, no hay gente, si no hay gente, sobran casetas, obvio.
”La Iglesia se moviliza para dar acogida a refugiados” (Portada del martes 6) u El Papa toma la iniciativa