Y más sacrificios

Desde Terrassa. Y lo que realmente fastidia es que siempre somos los mismos, y los mismos de siempre hemos de tolerar que la “estirpe privilegiada” de la que alguna vez habló Rajoy, sean quienes nos mal defienden de la penosa situación que ellos no han sabido o querido prever, cuando aún estaban a tiempo de enmendarla. Sucede que, con un muy suave indicio de tenue recuperación, el presidente y su ejecutivo, se permiten hacer alarde de buena gestión, cuando ésta aún no ha conseguido solucionar su corrupción, el paro del 26%, la parálisis económica del país, el crédito de los bancos a Pimes y autónomos, las maltrechas sanidad y enseñanza, los desahucios que aún continúan, la creciente pobreza social, sus ataques a Cataluña sin dialogar sobre el problema, el 56% de jóvenes en busca de empleo, y un sin fin de negligencias que denotan una total incompetencia gubernamental. Para postre, el encuentro del Rey en Bilbao con la señora. Cristine Lhagarde, ha propiciado que la Gerente del FMI se haya permitido decirnos que aún no hemos hecho todos los deberes y tenemos que ajustarnos más con nuevos recortes, pero ella no dudó en subirse el suelo en el acto, cuando hizo el relevo a Dominique Strausskahn, dándonos un “claro ejemplo de austeridad” en plena crisis. El poder de algunos gobiernos, “no todos”, viven muy ajenos a la realidad de querer dar el mejor servicio a la sociedad, y la tienen como un instrumento que utilizan para vivir del “rebaño” aunque produzca con dificultad, y a los hechos me remito.