Villargordo, con su Virgen

La Fiesta de las Flores continuó con cierto regusto gastronómico en Villargordo, una celebración que apuesta por el “buen comer” para fomentar la feria de día entre los habitantes del municipio. La Plaza de la Constitución acogió al gentío que participó en las distintas actividades que se desarrollaron, entre las que destacaron las paellas cocinadas por los diferentes establecimientos hosteleros del lugar, que ofrecieron platos de comida gratuitos a los que se acercaron a vivir el ambiente de convivencia de estas celebraciones.

01 jun 2015 / 09:53 H.

 

No fue la única iniciativa que agradecer el estómago de los vecinos, sino que también se promovieron las degustaciones gracias a la cita “Yo guiso pa’ tos”, una especie de “competición” de tapas entre los restaurantes en la que, además del buen gusto, predominó la originalidad en la presentación y los sabores. Uno de los objetivos estaba en potenciar el lado gastronómico, como indicó Francisco Anguita, miembro de la comisión de Fiestas del Ayuntamiento. “Es increíble la aceptación que hay para esta cita, que estaba apagada hace años. Pretendemos recuperar el espíritu del calor humano entre los habitantes y que participen”, continúa.
En el paseo donde se celebraron las actividades se localizó una carpa, de unos cien metros cuadrados, donde se concentraron los vecinos, que disfrutaron de la feria y de un escenario en el que se llevaron a cabo diferentes citas, como conciertos de bandas musicales, recitales de baile o un certamen de rock. Alrededor de él, los residentes vivieron un ambiente distendido en el que reinó el compañerismo.
Sobre las nueve de la noche se inició la procesión de la Virgen del Amor Hermoso, que se sintió abrazada por los devotos que la acompañaron durante el recorrido.