Ver para creer

Ya tenemos restaurantes en nuestro país que admiten como cliente al perro de la familia a la par que sus amos. Le ofrecen una atención “animalizada”, ya que en este caso no podemos decir “personalizada”, teniendo una carta donde se puede elegir la comida que creamos mejor para ellos.

 

    24 sep 2013 / 16:18 H.

     

    Así, dueños y perros pueden disfrutar conjuntamente y sin discriminación de ir a comer fuera de casa. Si no lo veo no lo creo. Nos vamos superando en excentricidades, esnobismos o como se quiera adjetivar el asunto. Surrealista del todo. No sé ni pregunto a cuánto asciende ni que sea el menú del día para los acompañantes caninos, pero pienso que quizás con ello podríamos colaborar a solucionar el problema de desnutrición que sufren miles de niños y familias de nuestro entorno, o hacer un poco más llevadera la vida de mucha gente que está atravesando en estos tiempos una situación complicada. Lo dicho, ver para creer.
    Lourdes Camps Carmona desde Barcelona