Vecinos de Puerta de Martos denuncian peleas de perros
Los vecinos de la Puerta de Martos viven atemorizados por los residentes de la parte alta del barrio que organizan peleas caninas. Desde la asociación vecinal se denuncia que algunas de estas personas “provocan” a otros perros que van encadenados con sus dueños. Además, lamentan la falta de implicación de la Policía.
Nadie quiere dar nombres por miedo a las represalias de sus propios vecinos. Y es que desde la asociación Puerta de Martos aseguran que son numerosas las personas que se ven amenazadas por los perros de algunos residentes de la parte alta del barrio, concretamente por la Segunda Travesía Puerta de Martos.
Nadie quiere dar nombres por miedo a las represalias de sus propios vecinos. Y es que desde la asociación Puerta de Martos aseguran que son numerosas las personas que se ven amenazadas por los perros de algunos residentes de la parte alta del barrio, concretamente por la Segunda Travesía Puerta de Martos.
Se trata de la espina dorsal que recorre el cúmulo de casas en las que viven algunos de los vecinos “conflictivos”, según indican representantes del colectivo. Un laberinto de construcciones cuyos moradores conocen muy bien. “Llevamos con las quejas mucho tiempo. Hay vecinos que llevan a sus perros sin bozal y provocan a otros que van con sus dueños atados. De hecho, han llegado a quitar mascotas a algunas familias”, denuncian desde la asociación. Y es que, según quienes conocen bien la zona, ya no hay ni perros callejeros. Fenómeno que achacan a quienes los cogen para “entrenar” a sus canes para peleas callejeras al más puro estilo de las escenas que se adentraban en los tugurios mexicanos del filme de Alejandro González Iñárritu, “Amores perros”.
A pesar de la aparente tranquilidad de la calle principal que conduce hasta La Magdalena, la tensión entre los residentes se palpa con tan solo preguntar. Y es que las amenazas están siempre presentes. “Cuando a alguien se le ocurre llamar a la Policía, luego estos vecinos conflictivos se lían a lanzar botellas contras las ventanas de sus casas, por eso la gente se calla y no denuncia”, afirman desde “Puerta de Martos”. En este sentido, los representantes vecinales apuntan al servicio de los agentes de Policía. “En seis meses han subido dos veces [los policías]. De hecho, la última fue hace dos semanas. ¿Qué quieren que les cuenten que no sepan ya?”, indican desde la asociación.
La única solución que contemplan desde el colectivo vecinal es aumentar la presencia policial. “Que pasen, pero que también se paren”, manifiestan.