Valdés confía en acercar la Copa con un triunfo ante su exequipo

Inmerso en pleno fragor por la supervivencia, entre continuas idas y venidas a establecimientos de la capital para constatar, “in situ”, el enorme calado social de las iniciativas promovidas por la plantilla, a Álvaro Valdés (Madrid, 1980), aún le sobra tiempo para pensar en el fútbol. El centrocampista, apartado casi cinco meses por una grave lesión de rodilla en los albores de la temporada, ha adquirido relevancia en la segunda vuelta hasta erigirse en una de las voces autorizadas de un vestuario que lucha por subsistir fuera del campo y ambiciona la Copa del Rey sobre el césped. Mañana, en Puertollano, a las doce del mediodía, el equipo afronta la primera de las tres finales en su desafío de acabar sexto. Impulsados por las mejores sensaciones del ejercicio, los jugadores del Real Jaén lucirán el colmillo afilado. A Valdés, en cambio, se le agitará el corazón. Estará de vuelta a la que fue su casa durante las tres campañas anteriores. “Siempre resulta emotivo reencontrarte con tu antiguo equipo. En Puertollano viví una etapa positiva y conservo gratos recuerdos de la afición”, avanza. Sin embargo, la exaltación desaparecerá con el pitido inicial. Para Valdés, las opciones de lograr la clasificación copera pasan por superar a su antiguo club. “Vamos a por la Copa. Es nuestro reto particular hasta finales de campaña. Sabemos que un triunfo nos acerca al sexto puesto”, avisa, y destaca los méritos contraídos por sus compañeros. “Estar situados arriba entre tanto sufrimiento era algo impensable hace unos meses”, expresa, al tiempo que descubre la clave de la resurrección experimentada en el segundo ciclo: “El Real Jaén no se habría salvado sin la unión del vestuario. He pasado por diferentes conjuntos y nunca vi algo parecido. Desde el entrenador hasta el utillero, hemos estado juntos para seguir adelante”.  El papel de la afición sale a relucir para argumentar la capacidad de cohesión del grupo. “Sin ellos tampoco hubiera sido posible. Han estado con nosotros y lo siguen haciendo. La excelente acogida de los sorteos es otra muestra”, aclara.
     Por último, a falta de tres encuentros para cerrar su etapa como futbolista del Real Jaén, Valdés no duda en la selección de momentos que viajarán en su maleta. “Dentro  del campo, el gol conseguido ante el Écija. Me inyectó fuerzas después de cinco meses parado. Fuera, los compañeros y la afición. Inmejorables”.   José R. Casado / Jaén