Una victoria puede ser suficiente para salvarse
La lucha por la permanencia se presenta apasionante en las tres últimas jornadas. Aunque las diferencias parecen exiguas, la igualdad que preside la categoría convierte en oro cualquier punto de ventaja. El Real Jaén encara esta recta final en una buena posición, con la dinámica adecuada (ocho puntos de doce) y con una diferencia valiosa.

Cualquier cábala del equipo jiennense pasa por vencer a la Ponferradina. Un triunfo el domingo lo colocaría con 51 puntos y con la salvación prácticamente conseguida, aunque no de forma matemática. Para ello habría que esperar alguna jornada más. Esa puntuación, e incluso alguna menor, podría ser suficiente para salvarse en semanas posteriores siempre que el próximo domingo se diera un empate en el Girona-Mallorca y el Real Madrid Castilla perdiera en el campo del Córdoba. Así lo entiende José Jesús Aybar. En ese supuesto, el Real Jaén se situaría con 51 puntos, el Mallorca, con 47, el filial madridista, con 46, y el Girona con 45. Una distancia importante a falta de solo seis puntos por disputarse. “La prioridad es ganar nosotros a la Ponferradina, porque un triunfo sería un paso casi decisivo para la permanencia. Luego hay dos partidos claves (los mencionados) que pueden condicionar el final de la Liga. Con 51 puntos la salvación está muy cerca. Aunque habría que esperar. Todo dependerá también de los empates que se den, porque es un resultado que suele repetirse en la recta final de una competición”, explica el director deportivo del Real Jaén, que tiene claro que, con 52 puntos, no habría cábalas ni riesgo. “De eso no hay duda”, apostilla.
Aybar deja claro que lo mejor para el Real Jaén es que se jugará la permanencia en su estadio y que, además, llega al momento final en un buen estado anímico y en una buena dinámica de resultados. “Nosotros tenemos la oportunidad de jugarnos el objetivo en nuestro campo, que es muy importante. A nadie le gustaría llegar al último partido por la ansiedad que ello generaría, pero, si es así, lo haríamos ante nuestro público, con lo que eso supone. De todas formas, lo más importante ahora es derrotar a la Ponferradina y sumar tres puntos”, añade. Y agrega sobre el equipo: “Está en una buena situación, sobre todo con mucha seguridad, como demostró el pasado sábado en Mallorca. La respuesta del grupo en la segunda parte fue excelente”, matizó.
Todos los equipos implicados en el descenso afrontan un calendario final complejo y difícil, porque la mayoría se enfrenta con rivales que tienen algo en juego en los últimos compromisos. La Ponferradina tiene como rivales al Real Jaén, el Girona y Las Palmas. El Real Jaén se medirá con la Ponferradina, el Deportivo y el Alavés. Nada fácil lo tiene el Mallorca, que juega con el Girona, Las Palmas y el Córdoba. El Real Madrid Castilla medirá sus fuerzas con el Córdoba, el Sabadell y el Murcia. Duro es el calendario del Alavés, con el Éibar, el Numancia y el Real Jaén como oponentes. El Girona también tiene un final muy exigente. Jugará con el Mallorca, la Ponferradina y el Deportivo. Por último, el Hércules, con escasas posibilidades de salvación, se medirá con el Lugo, el Mirandés y el Barça B.