Una velada intensa para enamorarse del flamenco
El Auditorio Municipal reunió a un cartel de lujo con Antonio Reyes, Aroa Cala y Miguel del Pino al cante, a la guitarra Manuel Silveria y Manuel Martínez y al baile Marta Guillén con su cuadro flamenco. No fue una velada más, en esta ocasión, la Peña Flamenca estaba de aniversario.
Cumplió 30 años desde su fundación, un aliciente más para que el cartel de este año llamara la atención del público. Y cumplió. El auditorio acogió a multitud de gente que se acercó hasta allí para disfrutar de un arte que es Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
El primer artista en pisar las tablas del escenario fue Miguel del Pino, acompañado al toque por Manuel Martínez. Le siguió Aroa Cala. Nacida en el Puerto de Santa María, esta artista lleva desde pequeña recorriendo escenarios de todo el territorio español. Además, confesó que esa noche allí era muy “especial” para ella, ya que ya había visitado desde niña el municipio marteño. A la guitarra estuvo Manuel Silveria, un viejo conocido de la Peña Flamenca de Martos, tanto que la misma Peña le impuso la insignia de oro por su colaboración continua. La tercera actuación puso sobre las tablas el flamenco al completo: cante, toque y baile. Marta Guillén fue la protagonista al interpretar con el baile, la música que Miguel del Pino y Manuel Martínez tocaban con gran pasión. Esta joven, de apenas 18 años, vino desde Córdoba y dejó al auditorio con la boca abierta al observar sus certeros pasos Tras el descanso, y como recta final de esta gran noche, Antonio Reyes. Este cantaor cuenta con una trayectoria que se remonta a cuando era niño, y ha compartido escenario con grandes artistas de la talla de Antonio Canales o Ramón el Portugués. Al toque volvió a salir a escena Manuel Silveria.