Una sonrisa, un abrazo, un beso
Una nube no esconderá nunca el azul del cielo, tampoco un chaparrón logra entristecernos y es verdad que a veces la tormenta ennegrece tanto el ambiente que ese repelús nos pone en permanente alerta. Pero vamos desconectando entre truenos y rayos hasta que tras la tempestad llega la calma y huele tanto a tierra, que viajamos a nuestra niñez. Así eran los tiempos, cuando los días dejaban paso a las lunas y la noche al sol mañanero, hasta que llegaron otros, tan distintos y poco esperados, que nos han sumido en una profunda tristeza; nos dejamos llevar por la desesperanza y asumimos que quizá nunca volvamos a ser felices.

Tal es la congoja general que no hay noticias buenas, la tormenta se hizo eterna y podría decirse que toda una sociedad, entera, la española, tan animada y dicharachera, entró en depresión.
No todo puede ser economía, por mucho que le duela la prima de riesgo (lo que pagamos de intereses por el dinero que nos prestan) a las arcas del Estado. No debería el Gobierno decir continuamente que todo está mal, la herencia, la sanidad, la educación, las autonomías, los informativos de la tele, todo, todo, todo... Algo habrá bueno en algún rincón de este bendito país que es España, saquémoslo a relucir, por favor, algo positivo, algo que nos alegre, lo que sea. Y ya, cuanto antes, que despertemos de este mal sueño, de esta tormenta continua de oscuridad y lamento. Cierto que llegamos a fin de mes con muchísimas dificultades, que a los abuelos la pensión no les da para más platos en la mesa, incluso que todo es susceptible de empeorar aún más para los parados. Pero no, salgamos, entremos, no nos quedemos en casa, vivamos, disfrutemos de la familia, de los amigos, de todo lo bueno que nos rodea que es tanto y tan sabroso que no se cansa uno de nada. Por mi parte, una sonrisa, un abrazo, un beso. De corazón, porque hoy, otro domingo más, llegan hasta el final leyéndome y me traen en volandas hasta estas 1.000 semanas de contarles lo que pasa en Jaén, que eso es el periodismo puro, contarle a la gente lo que le pasa a la gente. Gracias, mil gracias, nos vemos donde siempre, en esta última página.
En voz alta
Política y periodistas...
Aveces ustedes me preguntan con interés, cómo son las relaciones de un periodista con los políticos y la verdad es que no es fácil la respuesta. Les digo, lo saben quienes a menudo me interrogan sin esquinas, que con la política hay que guardar la distancia, cerca, pero no pegados; pendientes, pero sin exclusividad. Es tan noble el ejercicio de la política, defiendo tanto a los buenos alcaldes, que no me cansaré de reclamar a los ejercientes que engrandezcan el arte de hacer posible lo imposible. Incordiar, oficio de periodista; transformar la realidad, oficio político.Las relaciones entre quienes mandan y quienes escriben de lo que pasa siempre es tensa
En voz baja
...Periodistas y sociedad
Tiempos convulsos para el periodismo en general y para el escrito, más cruelmente triste. Con todo y aun desde el desasosiego, es vital no perder nunca el norte, los lectores, y para ellos, la noticia singularmente nuestra, con chispa y haciendo de historias de gente normal apasionantes géneros periodísticos. Lo suelo comentar de otra forma cuando me llaman de las escuelas para que les hable a los jiennenses de hoy y de mañana: Menos mirar al escenario, casi siempre ocupado por las esferas del Poder, y más atención al patio de butacas, que ahí estamos todos los normales.El periodismo, más el periodismo local, no debería perder su identidad aun en tiempos de crisis
9 FRASES para 1.000 mañanas
“¿Es Jaén victimista por necesidad o esclava de su victimismo?” 1992
“Jaén entra en coma y a los representantes públicos corresponde ponerle el suero que no convierta una gravísima enfermedad en algo irreversible” 1995
“La Semana Santa de Jaén, si la dejan crecer en paz, si deja de mirarse en espejos que no son los suyos, irrumpirá con una personalidad propia” 1999
“A Jaén será que no podían venir 10.000 millones, pero sí 40.000 a Terra Mítica” 1999
“En Jaén es más fácil criticar al que hace que al que no hace y, curiosamente, estamos donde estamos porque hay muchos que hacen “nada” a diario” 2001
“Qué difícil es escribir cuando la sangre quiere salirse por el cuello y derrotar, embestir como un caballo desbocado sobre los indeseables que hacen fuerte la barbarie terrorista” 2004
“Quieren que seamos ciegos en el país en el que mandan los tuertos, que, por supuesto, son ellos” 2005
“Un periódico aparenta impersonalidad, pero tiene detrás hombres y mujeres que le dan alma, sentimiento y corazón” 2006
“Me posiciono en contra de la mal llamada fusión de la Caja de Jaén porque van a devorarnos” 2008